Organización, organización y más organización. Eso es lo que necesitas para sacar partido a tu lavadero. Y es que la zona de lavado no acostumbra a ser un gran espacio, al contrario, para aprovechar los pocos metros reservados a nuestra lavandería doméstica y zona de planchado hay que agudizar el ingenio.

Por eso, dependiendo de los metros cuadrados disponibles deberás pensar cómo distribuir los electrodomésticos -lavadora y/o secadora- y qué tipo de armarios puedes poner para ganar almacenaje y poder guardar la ropa sin que se vean montañas de prendas que necesitan plancharse.

Si además la zona del lavadero la compartes con otra estancia como la cocina, el cuarto de baño o incluso el distribuidor, deberás pensar en cómo integrar ambos ambientes para que ya no sólo decorativamente hablando el espacio "funcione" sino que convivan de manera armónica. Panelar los electrodomésticos, usar puertas correderas o integrar un armario "falso", son soluciones que consiguen el resultado buscado.​

Y si por mucho que busques y rebusques no encuentras los (pocos) metros que necesitas para tener una zona reservada al lavadero, ya sabes que nosotros siempre venimos al rescate proponiéndote un montón de ideas y de trucos.