Los pasillos tienden a ser los eternos olvidados a la hora de decorar un hogar. Son pasos que conducen a la zona de noche o, a la inversa, a la zona de día. Sin embargo, se nos olvida todo el partido que podemos sacarles si sabemos cómo aprovecharlos. Pasar de tener un paseo largo, estrecho y sin vida a un recorrido con almacenaje, acogedor y con buenas ideas, es posible. Los profesionales en este sector nos lo demuestran con sus proyectos, como es el caso de Studiomac (@studiomac_interiorismo), cuyos interioristas nos han enseñado que se puede tener un pasillo pequeño de lo más equipado y estiloso.
En uno de sus últimos trabajos, hacían hincapié en este ambiente de un piso ochentero que se ha reformado en su totalidad, redefiniendo por completo su distribución. Sus nuevos dueños querían una casa sobre todo cómoda, funcional, luminosa y atemporal. Así, los interioristas supieron convertir su pasillo en una de las joyas mejor aprovechadas de la casa, optimizando así los metros cuadrados de la vivienda, en la que además se han eliminado barreras innecesarias. ¡Mira el resultado!
Antes: un pasillo en plena reforma con muchas posibilidades
Los interioristas se pusieron manos a la obra en un espacio en el que, aparentemente, no hubiéramos pensado en todas las posibilidades que podía tener. No obstante, nuestra sorpresa ha sido descubrir que no solo le han dado una estética cálida y acogedora, sino que han agregado un espacio de mucho almacenaje y lo han convertido en un pasillo con estilo recibidor. ¿Vemos cómo ha quedado? ¡Sigue leyendo!
Después: un pasillo con recibidor y armarios con gusto por los detalles
¡Wow! Ahora este pasillo tiene de todo. Con los mismos metros cuadrados con los que contaba originalmente, se ha podido integrar un bonito armario empotrado con puertas blancas con molduras que simulan una pared. Pero tras ellas, se esconde un amplio hueco que aprovecha mucho espacio y que despeja otras zonas como dormitorios, sala de estar... Además, se ha instalado también una zona que simula un recibidor, ideal para esos hogares en los que no existe este ambiente y en los que directamente la entrada nos lleva al pasillo.
En tonos suaves y papel pintado para dar estilo y calidez a las paredes
El mobiliario actual de este pasillo, que además ha integrado una estantería abierta, tienen como material protagonista la madera de roble y el papel pintado en tono crema, muy suave, que le confieren un carácter más acogedor. Los suelos en espiga, las molduras de techos, los panelados y puertas del armario con tiradores negros, también le aportan un aire más sofisticado.
¡El resultado es increíble! Ahora este piso luce mucho más renovado, actual y sobre todo práctico. Y es que los interioristas han sabido agregar a sus pocos metros cuadrados, mucha funcionalidad. Ideas inspiradoras que nos demuestran que incluso los espacios más pequeños, pueden ser realmente los más atractivos de un hogar. Así, este pasillo ha pasado de estar desfasado y abandonado, a ser una zona de paso de lo más acogedora. ¡Nos encanta!