Espatifilio o cuna de Moisés: el truco secreto de los jardineros para que tu planta se llene de flores esta primavera

Aunque estos días de lluvia nos hagan creer que todavía queda una eternidad para la primavera, la realidad es que no queda mucho para darle la bienvenida el 21 de marzo. Por eso, si tienes jardín en casa, debes ponerte ya tu delantal y tus guantes de jardinería e ir poniéndolo a punto para que esté lleno de flores a finales de marzo.

Una buena opción para disfrutar de un jardín lleno de vida en primavera es el espatifilio, una planta que aporta una belleza sofisticada de altísimo nivel gracias a sus flores blancas. Y lo mejor, es muy fácil de cuidar, con poquito que le hagas conseguirás que florezca con todo su esplendor esta primavera.

Trucos para que tu planta de cuna de Moisés se llene de flores esta primavera

El Espatifilio (Spathiphyllum), también conocido como “cuna de Moisés”, es una planta de interior muy apreciada por su resistencia y su atractiva belleza. Se caracteriza por sus hojas verdes brillantes y sus llamativas flores blancas en forma de espata, que envuelven un espádice central. Esta estructura es la que le otorga el nombre de "cuna de Moisés", ya que recuerda a una cuna envolviendo a un bebé.

El espatifilio empieza a producir sus flores durante primavera y verano, así que si quieres que tu jardín esté luciendo flores bonitas en la próxima primavera, ahora es el mejor momento de añadirle esta planta. Para que florezca con abundancia, debes darle los siguientes cuidados básicos:

Ubicación y luz

La “cuna de Moisés” prefiere una luz indirecta y brillante, lo que significa que para estimular su crecimiento y floración lo ideal sería ubicarlo cerca de una ventana con cortinas traslúcidas o en un espacio con buena iluminación natural sin sol directo. Es importante que no le llegue la luz solar directa ya que podría quemar sus hojas.

Riego

A esta planta le gusta el sustrato ligeramente húmedo sin encharcamientos. Por eso, lo ideal es regarla cuando la capa superior de su tierra esté seca al tacto que, por lo general, suele ser aproximadamente cada 3 o 4 días en primavera y verano. Para que sus raíces no se pudran, evita el exceso de agua.

3. Humedad

Al ser una planta tropical, el espatifilio necesita un ambiente húmedo para desarrollarse bien. Si el aire de tu hogar es seco, puedes pulverizar sus hojas con agua sin cal o colocar un recipiente con agua cerca de la planta para aumentar la humedad ambiental.

4. Fertilización

Para lograr una floración abundante en primavera, es recomendable abonar la cada 15 días con un fertilizante líquido para plantas de flor. Busca uno que tenga un buen equilibrio de nitrógeno, fósforo y potasio, ya que estos nutrientes favorecen el desarrollo de nuevas flores.

5. Poda

Por último, es importante que vayas observando tu "cuna de Moisés" y que vayas retirando las hojas y flores marchitas que detectes para estimular el crecimiento de nuevas flores y evitar enfermedades. Usa unas tijeras limpias para cortar desde la base cualquier parte dañada y así mantener la planta sana.