No es la primera vez que, en cuestiones relacionadas con el bienestar emocional y la búsqueda de la paz mental, pongamos el foco en Oriente para inspirarnos. Y es que la cultura nipona es famosa en todo el mundo porque, con la realización de pequeños hábitos muy fáciles de ejecutar, logran ser más felices cada día y se encuentran mejor consigo mismos. Y es que, por si no lo sabías, para los japoneses la búsqueda de la felicidad va de la mano de la paz mental, a las cuales, a su vez, siempre llegan a través de técnicas relacionadas con el orden y la limpieza de la casa. Porque te sonará Marie Kondo, ¿verdad?
Pues Marie no es la única japonesa en todo Japón que se preocupa por buscar la paz mental y el bienestar emocional a través del orden y la limpieza. Existe también un monje budista, llamado Shoukei Matsumoto, que promueve la práctica de un ritual ancestral japonés conocido como Soji, un método de limpieza que no solo transforma el hogar, sino que también tiene el poder de purificar la mente y ofrecer una sensación de tranquilidad y satisfacción en todas las áreas de tu vida. Básicamente, consiste en una rutina de limpieza de 15 minutos y, según Matsumoto, y los japoneses, te ayuda a tener un gran día, cada día.
Qué es Soji
El método Soji es mucho más que una simple rutina de limpieza, es una filosofía de vida que se enfoca en la búsqueda de la felicidad a través del espacio que nos rodea. Básicamente, lo que se consigue con este ritual ancestral de limpieza japonés es sentirte en armonía contigo misma y con tu entorno a pesar del estrés y las preocupaciones que nos acompañan en el día a día. Tal como recoge Shoukei Matsumoto en su libro 'Soji', esta rutina diaria de limpieza es un viaje hacia la armonía interior y exterior que conecta la paz mental con el orden y la limpieza.
Y es que para los japoneses la paz mental y la felicidad internas son el reflejo de un entorno externo ordenado y limpio. Según Matsumoto, el Soji es un método que transciende la limpieza física rutinaria para convertirse en una herramienta de transformación espiritual. En palabras de Matsumoto "es esencial para alimentar el alma, incluso más que la meditación, ya que nos ayuda a dejar atrás lo superfluo, a prescindir de lo que enturbia nuestro presente y a cultivar una mente clara y enfocada hacia el futuro". El soji nos recuerda la importancia de mantener una profunda conexión con nuestro entorno y ver la vida con actitud positiva y que el acto de limpiar, aunque sean solo 15 minutos, es una forma de meditación para lograrlo.
Cómo hacer Soji en tu vida diaria
Según Matsumoto, el Soji te ayuda a vivir de una forma más consciente y plena ya que viene a demostrarnos que en la simplicidad y en el orden de las cosas es posible encontrar la clave para disfrutar de una vida más feliz y armoniosa. Para incorporar este rutina de limpieza aplicando el Soji, deberás hacer lo siguiente:
- Empieza limpiando cosas pequeñas: No te agobies tratando de limpiar todo a la vez, es mejor empezar por una zona más pequeña de la casa, transformarla en parte de tu rutina diaria y así, poco a poco, ir aumentando.
- Siempre con intención: Es fundamental que, cada vez que limpies, lo hagas desde una plena conciencia. Para ello, concéntrate en cada uno de tus movimientos al limpiar y en cada una de tus respiraciones. Siente la conexión con tu cuerpo, tu mente y el espacio que estás limpiando.
- Celebra el progreso: Con este punto, el escritor se refiere a que dejemos de ver la limpieza como una obligación o una tarea aburrida, nos anima a a que cambiemos nuestra perspectiva y nos concentremos en los aspectos positivos. La idea es celebrar nuestro progreso y encontrar alegría en el cuidado de nuestro entorno.
- Crea un ritual: Para practicar el Soji, lo ideal es que cada una de nosotras nos creemos nuestro propio ritual personal. Por ejemplo, puedes encender una vela, poner incienso o simplemente hacer una serie de respiraciones conscientes antes de empezar a limpiar. Encuentra el ritual que mejor funcione para ti y ponlo en práctica.
- Ponte un horario: Aunque con el ritmo que llevamos sea difícil disponer siempre de la misma hora, por lo menos intenta marcarte una franja horaria para practicar esta técnica, te ayudará a mantener la rutina. Recuerda: solo 15 minutos serán más que suficientes.
En definitiva, el método Soji te enseña a valorar lo esencial, a ver las cosas tal como son y a establecer relaciones sanas con tu entorno y contigo misma.