Los expertos coinciden: las personas más felices tienen en común estos 5 trucos de limpieza rápida en casa

La pereza es nuestra gran enemiga en casa. Y es que, muchas veces, las labores de limpieza se nos acumulan para el fin de semana porque de lunes a viernes no sacamos tiempo para ir adelantando. Y es que, con solo 10 minutos al día, podrás adelantar muchísimo y, cuando tengas que hacer la limpieza general de la casa, ahorrarás muchísimo tiempo y esfuerzos. Además, como afirman muchos estudios científicos, tener la casa limpia mejora nuestro bienestar y tiene un impacto muy positivo en nuestra salud mental porque, cuando la casa está sucia, nos genera muchísimo estrés e insatisfacción.

Te prometemos que si limpias todos los días las siguientes superficies de casa, entre todas no te llevará ni 10 minutos, poco a poco esta limpieza rápida se irá convirtiendo en un hábito y la harás cada vez más rápido y de manera más automatizada porque tu mente se centrará únicamente en esta tarea sin distracciones. Para que crees este hábito de limpieza rápido, a continuación, te damos algunas ideas de las superficies que puedes limpiar todos los días en menos de 10 minutos.

Trucos de limpieza rápida en casa

El principal truco para mantener la casa siempre limpia es dejar a un lado la pereza y dedicar un poquito de tu tiempo cada día para la limpieza de ciertas superficies. Y te decimos “poquito tiempo” porque, como mucho, esta limpieza rápida de superficies te va a tomar 10 minutos de tu día, un tiempo casi imperceptible que te permitirá ahorrar muchísimo en la limpieza general de la casa. Toma nota:

 

1. La encimera de la cocina

La cocina es uno de los lugares más concurridos de la casa y, por lo tanto, uno de los que más rápidamente se ensucian. Limpiar la encimera diariamente puede evitar la acumulación de suciedad y bacterias y lo mejor: solo te llevará 3 minutos. Para ello, retira cualquier objeto que no sea parte de la encimera, pasa un paño húmedo por toda su superficie y sécala muy bien con otro paño seco y limpio para que no se formen manchas por el agua.

2. La mesa del comedor

Al usarla para servir la comida y sentarnos a comer, la mesa del comedor se ensucia muy rápido. Mantenerla limpia no solo mejora la apariencia de la casa, sino que también crea un espacio agradable para las comidas y reuniones familiares. Por eso, nuestra recomendación es que, nada más termines de comer, retires todas las cosas de la casa, mantel incluido, y la limpiar con un paño y un poco de limpiador adecuado al material de la mesa (para vidrios, para maderas, etc.). Sécala muy bien. 

3. El lavabo del baño

El baño es otro de los lugares que necesita atención constante para mantenerse limpio y libre de gérmenes. Un lavabo reluciente no solo es más higiénico, sino que también proporciona una sensación de frescura. Por eso, cada vez que uses el lavabo (para lavarte las manos, peinarte, hacerte tu rutina facial, cepillarte los dientes, etc.), quita todos los productos y utensilios que hayas utilizado, vuélvelos a colocar en su lugar correspondiente y pasa una bayeta rápida con un poco de limpiador de baño sobre la superficie del lavabo y el grifo.

4. Los muebles del salón

Los muebles del salón acumulan polvo muy rápidamente, especialmente ahora en verano que, con el calor, solemos abrir las ventanas con mayor frecuencia. Para evitar que ese polvo que entra por la ventana se haya dueño de las superficies de los muebles y los deje con una capita blanca poco estética, te recomendamos que pases todos los días el plumero por ellos. Es algo que no te tomará mucho tiempo y que, además, será un gesto muy agradecido para las personas alérgicas.

5. El escritorio de trabajo

Si teletrabajas desde casa, un escritorio limpio y ordenado es fundamental para aumentar la productividad y reducir el estrés. Por eso, lo ideal es que, cuando termines tu jornada laboral, lo dejes todo recogido y lo limpies rápido recogiendo los papeles y los artículos de oficina, llevando la taza del café a la cocina y pasando por su superficie un paño de microfibra humedecido. Haciendo estos pequeños hábitos a la mañana siguiente, cuando te sientes a trabajar, empezarás el día con buen pie y buena energía gracias a que todo en el escritorio está en armonía.