Las humedades, una vez aparecen, son una auténtica pesadilla. La parte positiva es que existen soluciones que, por si solas o combinadas, funcionan a la perfección para deshacerse de ellas. Si al ordenar tu armario o zapatero has visto que presentan estos problemas, notas que la ropa tiene mal olor o incluso te has llevado el susto de ver manchas de moho, tienes que poner remedio con alguno de los métodos que te proponemos.
Tengo humedades en el armario, ¿y ahora qué?
La correcta ventilación de los espacios es fundamental para evitar la aparición de humedades, pero aun así, hay veces que salen. Hay que tener especial precaución en las partes de la casa que estén próximas a los pilares de construcción, pues son las más frías y las que suelen presentar este tipo de problemas.
No obstante, si tienes humedades en un armario o en un zapatero, aquí tienes un paso a paso detallado para ponerle remedio lo antes posible. Después, con un ambientador para armarios conseguirás que siempre huela bien.
- Limpia la mancha. Rocía la superficie con un spray antihumedad o haz uno mezclando una parte de lejía con dos de agua. Después limpia con una esponja o estropajo hasta que desaparezca. Deja secar.
- Aplica un tratamiento preventivo. Esto está especialmente indicado para armarios empotrados que no estén revestidos de madera (o sea que tengan las paredes interiores descubiertas, con pared) o también para los que son de madera maciza. En este último caso habrá que elegir un tratamiento antimoho o antihumedad específico para madera.
- Pinta o barniza. Elige siempre productos específicos para tratar y prevenir humedades. En cualquier centro de bricolaje o ferretería tienen varias opciones para esa zona específica.
- Coloca uno de los siguientes deshumidificadores en el interior del mueble.
Productos antihumedad para armarios y zapateros
Hay varios tipos de productos que absorben la humedad ambiental y hacen que la aparición de moho o manchas sea mucho menos probable. Algunos son remedios caseros, otros comerciales, pero todos ellos funcionan bien.
- Contenedores de cloruro de calcio. Funcionan genial para absorber la humedad ambiental que se acumula en forma de agua en su interior. Son baratos y muy efectivos en caso de condensación excesiva e ideales para armarios grandes. Los hay incluso que perfuman por si además de humedad hay malos olores.
- Sobres de silicagel. Te sonarán porque son los típicos que vienen en el interior de los bolsos cuando los compras. Este formato es ideal para colocarlos en los zapateros o el interior de los cajones. También los hay con percha para colgarlos de la propia barra del armario.
- Desmuhidificador. Para casos muy graves, el deshumidificador es un aparato eléctrico que absorbe la humedad ambiental y la acumula en un depósito. Solo se recomienda para armarios grandes o vestidores por su tamaño.
- Bolsitas de carbón vegetal. En el apartado de remedios caseros, este es el que mejor funciona. Con el carbón típico de las barbacoas (siempre que no sea específico para combustión acelerada, pues no sería seguro) podemos hacer unas bolsitas o colocarlo en un recipiente de cristal con una tapa agujereada. Además de la humedad, absorbe los malos olores aunque hay que ir renovándolo con frecuencia, ya que pierde eficacia.
- Arroz. Poner unas bolsas de tela pequeñas con arroz cada dos o tres semanas es un truco para que los cajones del armario no huelan mal.
- Bicarbonato de sodio. En este caso, el bicarbonato va mejor como desodorizante que como deshumectante, pero combinado con el arroz hace un buen equipo.
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