Se estima que del presupuesto total de pintar la casa, solo un 10-15% corresponde al material. El resto, entre un 85-90%, se destina a la mano de obra. Y es que contratar un pintor profesional tiene muchas ventajas, pero si tu presupuesto es ajustado... ¿por qué no pintar tú?

Aquí tienes un práctico y fácil manual de errores a evitar al pintar tu casa por tus propios medios. Quedará tan bien, que nadie diría que no lo ha hecho un experto en brocha gorda. Empezamos con la lista de errores:

1. No preparar las paredes

Tanto si se trata de una pared nueva como de una vieja con varias capas de pintura, lo primero que hay que hacer es preparar la superficie. ¿Cómo? Siguiendo este paso a paso para preparar las paredes:

  • Primero limpia las impurezas con una espátula
  • Con el canto de la espátula agranda ligeramente todas las grietas que te encuentres.
  • Después, con una brocha seca, cepilla la abertura para eliminar el polvo y con un pulverizador moja la grieta (sobre una superficie ligeramente humedecida agarra mejor la pasta al no secar tan rápidamente).
  • Aplica la pasta con la espátula en perpendicular a la grieta y de arriba hacia abajo.
  • Pon poca cantidad cada vez, extiende inclinando ligeramente la espátula y retira el sobrante con un movimiento vertical.
Comedor clásico con paredes con pintura decorativa de color salmón_ 00462011

La pasta tapagrietas puedes comprarla ya preparada o en polvo para mezclar con agua. En este caso, deberás hacer la mezcla con la proporción de agua indicada por el fabricante, preparando solo la que necesitas en cada momento. Si la compras preparada, te resultará más cómodo. En Leroy Merlin tienes de todo tipo, incluso pequeños envases que llevan la espátula incorporada.

Deja que la pasta se seque durante el tiempo indicado por el fabricante y lija con un taco de lija. Con un trapo o brocha seca, retira el polvo resultante. Con los orificios de tacos viejos puedes hacer dos cosas: dejar el taco dentro, así te sirve de relleno, cortándole la cabeza o sacar el taco y rellenar el orificio con un trozo de gasa o papel. Después emplastece procediendo igual que con las grietas.

2. No corregir las imperfecciones de las paredes

A veces la pared tiene abolladuras y desprendimientos de pintura debido a la humedad, manchas y demás imperfecciones. Antes de empezar a pintar es fundamental tapar agujeros con masilla, limpiar manchas con agua y detergente antihongos y de nuevo utilizar la espátula para eliminar esos desprendimientos de pintura. Si alguna de las esquinas de tus paredes están golpeadas, debes reconstruirla para que el posterior trabajo de pintura sea perfecto. Utiliza una regla metálica o listón como tope, para hacer el ángulo.

3. No usar base

Una vez rellenas las grietas y orificios, lijada la pasta y retirado el polvo, aplica una imprimación con un rodillo. Esto te garantizará que la superficie absorberá la pintura por igual. Deja secar y tienes tu pared lista para pintar. Una base de primer ayuda a que la pintura se adhiera mejor a la superficie, resultando en un mejor cubrimiento de la pintura regular. Para ahorrarte capas y capas de pintura, usa una base primero.

4. Sacar la cinta de pintor cuando la pintura ya está seca

Seguramente ya sabes que tienes que usar cinta de pintor para proteger bordes, enchufes, pomos, tiradores, etc. Pero... ¿sabes cuándo hay que quitarla? No esperes hasta que la pintura seque para despegar la cinta de carrocero, ya que puede despegar la pintura que acabas de poner. Quita la cinta apenas termines la última capa. No te preocupes, la pintura no se correrá.

5. Poner el pincel en la lata completamente

Al usar un pincel, este no debe introducirse en la lata completamente. No busques tocar el fondo. Mejor sumerge el pincel solo dos tercios. De esta manera no estarás desperdiciando pintura.

Detalle de pinturas y pinceles

Utiliza un rodillo de pelo corto para evitar las burbujas. Para espesar la pintura y que no gotee, lo suyo es darle calor para que evapore líquido o ponerle un poco de yeso. Si no cubre bien, no intentes arreglarlo estirando demasiado la pintura. Carga el rodillo con la medida justa.

Ojo, si la pintura se desprende es un indicador de que probablemente haya humedades o salitre en la pared. Siempre escurre ligeramente la brocha antes de comenzar a pintar y aplica capas finas.


6. Pintar capas sin esperar que seque

La impaciencia puede ser tu peor enemiga a la hora de pintar. Una capa de pintura no es suficiente al pintar, por lo que debes esperar que cada una seque antes de pintar otra vez. Deja pasar 24 horas entre capa y capa de pintura si es posible.

Si una vez seca, la pintura se cuartea o resquebraja, o aparecen manchas en ciertas zonas es que no se ha adherido correctamente porque la pared estaba sucia. Retira la pintura y vuelve a empezar. Las manchas pueden ser por suciedad, hollín u óxido. Aplica una mano de pintura sintética en acabado mate y, cuando seque, pinta con el color deseado. Si las manchas se deben a un tema de humedades, tendrás que solucionarlo antes de repintar correctamente.

7. Pintar en días húmedos

En días húmedos la pintura tarda mas en secar, por lo que es recomendable pintar en días secos. En lo posible, pinta también en días frescos, cuando puedes tener todas las ventanas abiertas para adelantar el proceso de secado. No pintes con una temperatura inferior a los 10ºC. Si bien hay que evitar las corrientes de aire, el ambiente de trabajo ha de estar ventilado.

8. Pintar las placas de interruptores

Piensa en los detalles cuando pintes. Las placas de interruptores no se deben pintar. Tómate un tiempo para quitarlas antes de comenzar o, mejor, cúbrelas con cinta de pintor. Si quieres un resultado profesional, debes pensar como un profesional.

9. No proteger los suelos ni los muebles

Apila los muebles en el centro de la estancia y tápalos con plástico o sábanas. Protege el suelo con una gran lámina de plástico o nailon. Y, como ya hemos dicho, cubre las zonas pequeñas (enchufes, marcos, ventanas, etc.) con cinta de carrocero.

Botes de pintura

10. ¡No te quedes corto!

Quedarse corto con la cantidad de pintura y no saber qué tono o marca concreta necesitamos es, aunque sorprenda, algo habitual. Calcula los metros cuadrados exactos que vayas a pintar, anota siempre la referencia de la pintura usada y ten en cuenta el tipo de pared: las lisas necesitan menos capas que las rugosas, por ejemplo.

Venga, ¡anímate! Si pintas tu propia casa y lo haces evitando estos errores quedará genial y tu bolsillo te lo agradecerá. Eso sí, dedícale el tiempo necesario, vístete con ropa fresca y que sea para usar y tirar, apuesta por un material de calidad como la pintura natural, y ¡a pintar! Sin errores, claro.