Blancos, de madera decapada, con espejo, grandes, pequeños, empotrados, en esquina... Aquí encontrarás tal variedad de armarios que será difícil que no des con el tuyo. Entra en la galería de imágenes porque, además de verlos con detalle, te contamos las ventajas de cada uno. Así, seguro que encuentras el que más se adapta a ti y a tu dormitorio.

Piensa que a la hora de escoger armario deberás recurrir a una serie de filtros que te ayudarán a ser más práctico. Porque con este mueble no solo vale el "me gusta/no me gusta".

Por tipo de apertura

Si tu dormitorio es pequeño y el espacio entre la cama y el armario no mide más de 50 cm, necesitarás un modelo con puertas correderas sí o sí. En cambio, si el espacio te da más margen, las puertas batientes no dejan ni un cm interior sin uso.

Por material

Los armarios de madera maciza de la abuela, con aquellas puertas trabajadas y labradas por artesanos carpinteros (haberlos todavía haylos, pero en anticuarios y almonedas) han dejado paso al práctico DM –pintado o lacado– para las estructuras. Si deseas un volumen uniforme, opta por puertas del mismo material, mientas que si persigues mayor ligereza y luminosidad, piensa en frentes de cristal, transparente, opaco o pintado. Las puertas con cristales transparentes se pueden volver más cálidas e íntimas incorporando unas ligeras cortinas o visillos. ¡Ah! y no podemos olvidarnos de la madera decapada, que le aporta un look envejecido, "vivido", de lo más carismático.

Por color

Aquí entramos en el universo de "para gustos, colores". El blanco nunca falla. La madera clara le dará un aire nórdico a tu dormitorio. Los lacados en tonos pastel, para un estilo romántico. Te desaconsejamos tonos muy vivos u oscuros, porque este mueble suele ser voluminoso y no queremos que su presencia y entidad en la sala sea abrumadora o reste luz.

Por medidas

Los armarios a medida aprovecharán hasta el último milímetro de la habitación. La única pega: suelen ser más caros que los de medidas estandarizadas. Si el armario es compartido para una pareja, dos cuerpos gemelos, con distribuciones ajustadas a las necesidades de cada uno sería lo básico.

Es muy importante que tomes medidas del espacio donde quieras poner el armario para no llevarte sorpresas. Ten en cuenta que los modelos esquineros son una buena opción para cuartos pequeños donde se busca ganar capacidad de almacenaje.

El toque final: los tiradores

Siempre hacemos énfasis en la importancia que tienen los detalles, pero en el caso de los tiradores, su diseño es determinante para la estética general del armario. Su ausencia también dice mucho, ya que proporciona frentes totalmente lisos, que parecen una pared más. Los pequeños, tipo pomo metálico o de porcelana, dulcificarán la imagen, aunque para hojas XL pueden resultar poco prácticos debido a su mínima superficie de agarre. Mientas que los finos, alargados y rectos aportarán un estilo más actual al mueble.

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