Un piso moderno y pequeño de 70 m² muy luminoso y lleno de trucos de almacenaje. Un proyecto de Pia Capdevila (con plano)

Solo entrar a la vivienda, encontramos el pasillo de la casa, en el que la interiorista ha sacado el máximo partido al espacio, colocando un armario a medida muy funcional que integra un banco, una repisa donde poder dejar las cosas y un zapatero. ¡Es lo más!

De vuelta al pasillo se accede a la zona de día, pero antes de llegar a la zona de ensanchamiento en la que encontramos una zona abierta con la cocina, el comedor y el salón, encontramos un pequeño rincón de oficina. Este espacio se ganó de la habitación principal para poder crear un pequeño rincón cómodo y funcional donde poder hacer home office cerca del salón aprovechando la luz natural. 

Los colores escogidos para la base de la pared tienen un papel fundamental a la hora de crear un espacio armónico, práctico y lleno de estilo. 

Tras pasar por las manos del estudio Pia Capdevila Interiorismo, se ha conseguido potenciar la luz natural de este salón moderno y muy estiloso. Los detalles en marrón oscuro, tanto de la mesilla de centro como de los reposabrazos del sillón, le dan el toque actual a esta estancia. El toque verde de las plantas de interior aporta frescura y mucha vitalidad al espacio.

"Aprovechamos la pared del pasillo en la zona donde se ensancha la cocina y empieza el comedor para generar una librería de poca profundidad con capacidad cerrada destinada a cristalería y almacenaje en vertical para la zona del salón", explica la interiorista Pia Capdevila.

Tras la puerta corredera de listones de roble de la librería encuentra escondida un a pequeña televisión.

La zona del salón comedor queda visualmente abierta a la cocina gracias a una gran pared acristalada a través de un biombo. En el lateral de la pared de cristal que separa la zona de cocción del salón, se ha integrado una mesa de comedor que aprovecha al máximo el espacio. 

Este mobiliario a medida situado en el salón, ha permitido colocar varios cajones con mucha capacidad de almacenaje que hacen que el espacio se vea ordenado y con el suelo de madera de roble libre de objetos. El mismo mueble tiene una pequeña hornacina que, además de decorativa, es muy práctica, ya que permite almacenar libros u otros objetos.

La cocina abierta al salón comedor se ve super luminosa gracias a la luz natural que entra a través de los grandes ventanales del salón. La cocina blanca acristalada a través de un biombo está pensada para el día a día, pero también para que se convierta en el corazón de la casa. Al tratarse de una zona abierta, la cocina sigue la misma línea decorativa que el resto del piso, donde los colores piedra y los naturales toman protagonismo.

Para la decoración de la cocina se ha optado por los colores piedra con una encimera de estética pétrea de porcelánico con aspecto muy natural en un tono un poco más claro que el color piedra del mueble y aplicaciones en roble como en el resto de la casa. Los armarios blancos sin tirador hacen que este espacio luzca más amplio y suman elegancia a la cocina.

El dormitorio principal cuenta con una cama de 160 cm con arcón y mucha capacidad de almacenaje. Se ha diseñado un mueble bajo la ventana y otro mueble a los pies de la cama que permiten guardar cualquier objeto y mantienen la estancia ordenada.

A diferencia de otras estancias, en este dormitorio no se ha usado la madera como recurso decorativo, sino que se ha priorizado la laca en colores blanco y azul. La apuesta por un azul elegante y sereno sobre una base de tono piedra, le da el toque de personalidad al espacio. 

El arrimadero de pared a pared y lacado en azul se ha creado a modo de cabecero de cama, permitiendo así optimizar el espacio del dormitorio, incluyendo dos mesitas de noche voladas y un estante de pared a pared. 

El papel pintado de la pared combina perfectamente con los tonos azules del cabecero y con los textiles de la cama. Sobre el arrimadero se han instalado apliques de lectura que permiten una iluminación puntual confortable y funcional sin ser demasiado potente.

El dormitorio más pequeño se ha destinado a dormitorio de invitados que puede transformarse perfectamente en un despacho, vestidor o salita de relax extra. 

Ahora encontramos una cama nido ideal para dar uso al dormitorio de invitados. 

Para el suelo del baño se ha escogido un porcelánico, imitación madera, que le aporta la calidez de la madera, pero con las ventajas del cerámico en cuanto a mantenimiento, limpieza y resistencia. Para aprovechar mejor el espacio y guardar el baño para que parezca más ligero visualmente, Pia Capdevila ha diseñado un mueble volado en color blanco con almacenaje adaptado a las dimensiones y necesidades de los propietarios.

Como la mampara de la ducha suele ser un elemento que condiciona el espacio, Pia Capdevila ha escogido un modelo sin puerta ni perfilería que aligera el espacio. 

A través del plano del piso de 70 m² podemos ver cómo ha quedado la distribución de esta vivienda con el objetivo de aprovechar al máximo el espacio y sacarle partido a todas y cada una de las estancias que componen el piso.