Siempre que se lleva a cabo una reforma parcial o integral en un hogar, es porque no se adapta a las necesidades y gustos de los propietarios. El estudio de arquitectura e interiorismo Quefalamaria, encabezó el proyecto de dar un lavado de cara a un ático de obra nueva a las afueras de Vitoria-Gasteiz. La propiedad cuenta con 97 m2 y, aunque sus tres dormitorios, dos baños, cocina, salón-comedor y terrazas exteriores sonaban de maravilla, la distribución con la que contaba la casa no era tan de ensueño como se esperaba. Así, los interioristas trabajaron para convertir dicho ático en un espacio en el que se ha aprovechado cada metro cuadrado. ¿Vemos el resultado? ¡Vamos!