Hay casas que tienen algo. Ese 'no sé qué' que las hace irresistibles, acogedoras y donde todo parece más fácil, más fluido… más feliz. No es una cuestión de metros ni de presupuesto. Tampoco hace falta una reforma integral ni dejarse el bolsillo en el intento de ponerla a punto. A veces, lo único que necesita tu casa para que te sientas realmente a gusto en ella son pequeños gestos con grandes efectos. Porque con solo cambiar un par de cosas —y otras tantas que ni te imaginabas— puedes hacer que tu casa respire otra energía y sea más luminosa, más cálida, más tú. Y no hablamos de milagros decorativos, sino de soluciones muy sencillas y asequibles que puedes aplicar en un fin de semana o, incluso, en una tarde en la que te sientas inspirado.

Así que si últimamente no te apetece tanto estar en casa o sientes que tu salón, tu dormitorio o tu cocina piden a gritos un pequeño empujón, este es tu momento. Coge ideas, inspírate y ponlas en práctica: te prometemos que el cambio se nota, ¡y  mucho! Aquí van 10 formas infalibles de estar más a gusto en casa sin hacer obras.