Adrián Gómez, arquitecto: "Tirar paredes y tabiques sale caro, te puedes cargar la privacidad y la insonorización"

Hay que pensar que derribar paredes entra en el presupuesto. Así que se podría decir que abrir, comunicar y hacer espacios diáfanos sale caro. No solo porque hay que pensar en esas partidas de derribo, sino porque… ¿Y luego? Los cerramientos acristalados son caros. "Derribar paredes para conseguir un salón abierto y luminoso parece una gran idea… hasta que descubres que te has cargado la privacidad y la insonorización", recuerdan desde Lobo Studio. Así que hay que pensar bien en todos los aspectos del día a día.

Hay que pensar muy bien la iluminación de un espacio, pero… ojo con pasarse con las tiras LED y la retroiluminación. Sobre todo si no se escoge la temperatura de luz adecuada. "El exceso de focos empotrados crea un ambiente frío y sin personalidad. La luz general es importante, pero la clave está en jugar con luces indirectas y puntos estratégicos para crear una atmósfera acogedora", señalan los expertos consultados. ¡Hay que combinar diferentes tipos de luz!

Aquí también hay que pensar que hay materiales que suben como la espuma, pero ¿son prácticos? ¿Sobrevivirán bien al paso del tiempo? Hay que incorporar las tendencias, aunque está bien hacerlo con medida. Y si "asientas" un poco lo que te hace sentir esa tendencia, mejor. Hay materiales atemporales que de base harán que tu casa soporte bien el paso del tiempo. 

Desde el Lobo Studio nos indican que, por ejemplo, el microcemento es precioso, pero resbala si no se trata correctamente. El suelo blanco es minimalista, pero requiere limpieza constante. El grifo negro mate es tendencia, pero se mancha con solo mirarlo. ¿La solución? "No te dejes llevar solo por la estética: elige materiales que no solo sean bonitos, sino también funcionales y fáciles de mantener", matizan.

"El peor error en una reforma es pensar que todo se puede hacer sin ayuda experta. Desde errores estructurales hasta mala planificación, improvisar puede salir muy caro", anuncian los expertos consultados. Arquitectos e interioristas ahorran dolores de cabeza, quebraderos, sufrimiento y ¡dinero! Para algo saben de lo suyo. Te aconsejan, manejan partidas presupuestarias, imprevistos, gestionan los oficios…

Las duchas sin plato como tal -duchas de obra- son elegantes y modernas. Y si están enrasadas al nivel del suelo, el efecto de continuidad es muy atractivo. Pero ojo, si la inclinación del suelo no es la adecuada, la inundación está servida. Es esencial elegir un buen diseño del desagüe y darle pendiente suficiente.

Ojo con el "todo a la vista". Minimalismo no significa vivir sin armarios. "Muchas reformas sacrifican el almacenamiento por el diseño y luego la casa parece una tienda en liquidación, con objetos apilados por todas partes", apuntan los profesionales del estudio consultado.

Hay que aprovechar el espacio con soluciones a inteligentes y a medida. Se pueden dejar espacios a la vista, pero con planificación. No pueden faltar armarios para mantener el orden y se puede hacer sin perder estilo.

Nos gusta mucho cómo lo define Lobo Studio: lo que hoy es wow, mañana es uff. Tal cual. Aquí podemos insistir en la idea que veíamos al principio: cuidado con lo que se integra y cómo en la decoración. Hoy es 2025, me gusta. Pero… ¿Y en 2035? ¿Pensarás igual? Por eso es importante apostar por bases neutras, mucho más adaptables y atemporales y añadir las tendencias en elemento que sean fáciles de cambiar. De esa manera, renovar la casa no es un problema.

"Empezar una reforma sin una visualización previa es como comprar ropa sin probársela", declaran desde Lobo Studio. El render es una manera de ver cómo quedará y que así, en la cabeza de clientes y profesionales, haya lo mismo. "Los renders 3D permiten ver cómo quedará el espacio antes de que empiecen las obras. Hoy en día, hay opciones inmersivas que te permiten incluso recorrer tu futura casa con realidad virtual, asegurando que todo encaje a la perfección antes de gastar un euro en materiales o derribar paredes", concluyen.