7 lugares de casa donde NUNCA deberías poner cortinas según las estilistas de El Mueble

Las cortinas no son lo más recomendable para vestir las ventanas a media altura, ese es lugar para los estores, según nos cuentan en Gancedo. Si pones cortinas lo más seguro es que interfieran en el mueble que tienes colocado debajo en el que, además, no podrás apoyar objetos. En este baño, esta recomendación tiene todavía más sentido. Las cortinas tan cerca de la bañera semientrastada pueden ser un estorbo a la hora de bañarse. Además de quedar mojadas cada vez. Tenlo en cuenta. 

Aunque la idea de poner cortinas en lugar de puertas es una buena solución en casas de aire relajado, hay que encontrar la medida justa. Si las usas en lugar de las puertas de los armarios del vestidor, luego no es necesario que lo pongas en el acceso a esta estancia, y viceversa. Prescindir de las puertas del armario es buena idea si tienes un presupuesto ajustado, ya que las puertas encarecen mucho el precio de tus armarios. Eso sí, no es necesario que 'forres' de tela todo el vestidor, como aquí, lo empequeñeces y queda algo anticuado. 

Otro sitio en el que no debes poner cortinas son las ventanas que quedan muy pegadas a una escalera, como es el caso de la escalera de esta litera. Se trata de un lugar en el que las cortinas te pueden hacer tropezar al bajar y subir. Así que mejor unos estores que no interfieran tanto el paso. 

Las cortinas, aunque queden bonitas como aquí, tampoco son la mejor elección para vestir las ventanas de la cocina. Básicamente, porque se impregnan de los olores y humos que se generan al cocinar. En esta estancia son mejor soluciones sintéticas más fáciles de limpiar como los screens que con un paño húmedo se lavan y no retienen tanto los olores. También son perfectos si, como aquí, la ventana no llega hasta el suelo. 

Las cortinas tampoco son lo más recomendable en dormitorios infantiles, sobre todo de bebés. Pueden estirarlas, enrollarse con ellas, coger la cuerda... por lo que es mejor optar por soluciones que no tengan tantos 'peligros' y no les queden al alcance de la mano, como unos estores. Su tejido, cuanto más natural sea mejor, también por un tema de alergias. 

Entelar las puertas de los armarios es una opción muy decorativa para ocultar su contenido y dar calidez, lo que nos parece más extraño es poner cortinas tras la puerta de acceso a un vestidor en suite, como en la imagen. La puerta acristalada con cuarterones ya es suficiente separación y las cortinas añaden más ruido visual que otra cosa. Las paredes y cerramientos de cristal dejan pasar la luz, tienen mucho estilo y permiten la comunicación de espacios. 

Evita a toda costa poner abrazaderas en las cortinas, ya que le dará un aire anticuado a toda la estancia. En este dormitorio, además, las cortinas no están arrimadas a las ventanas y la sensación todavía es más extraña. Suponemos que es por las contraventanas de madera que tienen y para salvar el pilar entre ellas. Entonces es mejor optar por alguna solución más ligera, como unos visillos, y no grandes cortinajes alejados de la entrada de luz. Empequeñecen el espacio y no son ni prácticos ni decorativos.