Tu casa de verano se merece más cariño. Y lo sabes. Llénala de más estilo, más confort y, sobre todo, conviértela en ese espacio en el que dejas las preocupaciones en la puerta y te sirve para desconectar de la rutina. Y la decoración puede ayudarte, ¡y mucho! Con estas ideas conseguirás hacer de tu casa de verano un lugar en el que desconectar del mundo. ¡Ponlas en práctica!

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1.

Abre la decoración al exterior

Salo´n con grandes ventanales con vistas al mar

Sofá y cortinas de IKEA. Butacas de Maisons du Monde.

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Si tienes la suerte de tener una casa con unas impresionantes vistas, ¡no las tapes! Deja que su belleza forme parte de la decoración de tu casa de verano. Además de optar por cortinas vaporosas y ligeras, es importante evitar tapar estas vistas con muebles o piezas que impidan disfrutar de su belleza. Si, además, reproduces en el interior los mismos colores que hay en el exterior, el equilibrio y el estilo estarán garantizados. 

2.

Apuesta por tonalidades refrescantes

Salón con sofás blancos y cojines azules.

Sofás modelo Albert, de Atemporal. Mesa de centro y escritorio, de Tot Interiors. Taburete, de Let's Pause. Butaca de ratán, en MIV Interiores.

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Si en invierno los tonos como el blanco puro, el azul o el verde pueden resultar fríos, en verano son precisamente lo que necesita tu casa para conseguir que la deco sea más fresca y relajante. Y no hace falta que renueves toda la decoración. Para esto, las fundas de los cojines serán tus aliados. Y este es un tip que podrás usar también en tu piso en la ciudad si quieres que se vea más veraniego. 

3.

Somos fans de las fibras naturales

Porche cerrado con salón y comedor.

Sofás de Maisons du Monde y mesa de MisterWils.

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No nos cansaremos de repetirlo. Las fibras naturales son tendencia y llegaron para quedarse. Ahora, su uso original lo encontramos en porches y terrazas de los que disfrutamos cuando llega el buen tiempo. Por materiales como el yute, el coco, el sisal o el ratán serán tus grades aliados para crear una atmósfera slow que invite a la relajación. Sillas, sofás, mesas y hasta accesorios decorativos como las lámparas y las alfombras de estos materiales son básicos en una casa de veraneo. 

4.

¡Y de la madera!

Salón con sofás y butacas en blanco, y alfombra de fibras.

Sofá grande, de Maisons du Monde; sofá pequeño, de Ikea; butacas y mesa de centro, de Mercader de Venecia y alfombra, en Cotlin.

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La madera es uno de los materiales preferidos en decoración para garantizar la calidez. Pero también la calidad. Y en tu casa de verano también. Por eso, si tienes vigas y suelos de madera recupéralos para que luzcan con todo su esplendor. Y añade sillones y mesa con estructuras de madera. Combínalas con blanco y calidez y frescura irán de la mano. 

5.

Garantiza la sombra

Porche con pérgola blanca y sofás de mimbre.

Pérgola con vigas de madera pintadas de blanco. Sofás de El Corte Inglés. Mesitas de centro, de Gescova. Puf, en Pantay. Columpio, similar en Maisons du Monde.

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En verano, lo habitual es que la actividad del día a día se traslade al exterior. Pero para que sea una zona de cómoda y en la que apetezca estar es importante garantizar la sombra. Si tienes espacio, coloca una pérgola que garantice la sombra. Pero también puedes instalar un toldo, unas velas de sombreo o unas sombrillas que puedas trasladar donde quieras y la mejor opción si tu zona exterior es pequeña. 

6.

Trucos de estilista para el verano

Trucos de estilista para el verano

¿Quieres que tu casa refleje la frescura del verano? Estos trucos de estilista te ayudarán a que tu hogar luzca de revista, pero también refrescante y cómoda.

7.

Dí sí a los motivos marinos

Aparador con cuadros con motivos marinos.

Aparador con cuadros con motivos marinos.

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Si tu casa de verano está en la playa, recrea ese ambiente también en el interior. Adornos como conchas y cuadros con motivos marinos como corales o similares te ayudarán a conseguir que la playa y el mar se cuelen en tu apartamento de vacaciones. ¡Conéctate al modo verano!

8.

Para verano sí, para el resto del año también

Salo´n blanco abierto al comedor.

Sofá a medida, de Atemporal. Mesa de centro, diseño de Raúl Martins, en Findings Gallery. Lámpara de pie, de HK Living. Puf, de TC Collection. Alfombra, de Something Special. Suelo laminado, de Quick Step.

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Si tienes una segunda residencia, no la decores solo de cara a disfrutarla en verano. Trátala igual de bien que tratas tu residencia habitual. Y es que seguramente también quieras disfrutar de ella en otros momentos del año. Por eso, una alfombra gustosa, unas mantitas para el sofá y una iluminación envolvente son claves para que tu casa de verano sea una casa para todo el año- 

9.

Apuesta por la frescura

Casa de verano con sofá rinconero y adornos veraniegos.

Sofá, de Masabo. Pufs, de Maisons du Monde. Alfombra, de Alfombras Hamid.

El Mueble

No hace falta saturar la decoración de tu casa de verano para sentirla confortable. A veces hace más una pared con un solo adorno que llena de cuadros, fotos y otros elementos decorativos. Apuesta por el menos es más sin renunciar a la comodidad. Por eso debes pensar en qué necesitas para convertirla en un espacio más cómodo. ¿Un puff?, ¿una mesa auxiliar?, ¿un jarrón con plantas que regale vida? ¡Sí a todo! 

10.

Cortinas ligeras y vaporosas

Ventana con cortinas ligeras.

Ventana con cortinas ligeras.

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Tanto si tu casa de verano está en la playa como en el campo, es importante que te decantes por unas cortinas livianas y de colores claros que vistan tus ventanas. Este tipo de cortinas dejan pasar la claridad y la luz natural y no perjudican la sensación de amplitud y frescura. Además, será todo un placer ver cómo se mecen con la brisa veraniega. 

11.

Piezas que invitan a la vida slow

Dormitorio de verano con sillón colgante.

Cama, cortinas y alfombra del estudio del decorador Jean-Pierre Martel.

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En el momento en el que pones un pie en tu casa de vacaciones deberías dejar atrás todo tipo de preocupaciones del día a día. Estás ahí para resetear y cargar las pilas. Por eso, te invitamos a que incluyas en la decoración piezas que inviten al relax y a la vida slow. Un sillón colgante puede ser la pieza clave que suba el nivel decorativo. Y no solo son aptas para el exterior, en el salón o el dormitorio se convertirán en ese mueble que levanta pasiones. 

12.

Viste tu cama tan bien como la de tu casa

Dormitorio de verano con ropa de cama blanca y en tonos tierra.

Butaca y lámpara de Miv Interiores.

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No queremos que pases ni frío  ni calor. Por eso, al vestir la cama de tu casa de verano hazlo con capas. Así, las noches que refresque no tendrás que estar sacando las colchas del armario. Apuesta por tejidos naturales, como el lino y el algodón que permiten la transpiración y son mucho más beneficiosos para la piel. Asimismo, no escatimes en cojines. Tu cama de verano se merece el mismo tratamiento que la de tu casa. ¡Te encantará remolonear por las mañanas!

13.

Detalles que suman, ¡y mucho!

Dormitorio de verano con ventilador de techo.

Apliques y cojines de Maisons du Monde. Ventilador de techo de Leroy Merlin.

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No escatimes en invertir en elementos que garanticen un cómodo sueño en tu casa de verano. ¡Lo agradecerás! En este contexto, un ventilador puede hacer que tus noches sean mucho más relajantes. Pero su estética suele chocar con el estilo y el espacio. ¿Una alternativa estética y que pasa desapercibida? Un ventilador de techo con aspas de madera con luz integrada.  

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