Es cierto que el dormitorio es nuestro rincón de descanso, pero también es mucho más que eso, ¿verdad? Es nuestro refugio personal, el lugar donde terminamos el día con una lectura, una charla tranquila o ese último vistazo al móvil antes de dormir. Es, además, el espacio donde compartimos momentos de intimidad y reconexión con nuestra pareja, convirtiéndolo en un rincón especial que merece una atmósfera acogedora y personalizada.
Y para lograr esa atmósfera, la iluminación juega un papel fundamental. Las lámparas en la mesita de noche son esenciales, proporcionando la luz cálida y suave que invita al descanso. Aunque las clásicas lámparas de sobremesa siguen siendo una elección popular, poco a poco han dado paso a nuevas opciones, como los apliques en la pared o el cabecero, y las elegantes lámparas de techo, que liberan espacio y aportan un toque moderno.
Así que cuéntanos, ¿qué tipo de luz prefieres para despedir el día con esa sensación de calma y confort?