Todos los días lo mismo: te levantas, te vistes y desayunas tu café con leche y algo rápido para entonar el cuerpo pero, claro, cuando llegas al trabajo tienes hambre y vas picando de aquí y de allá hasta la hora del café, en la que te desquitas como si no hubiera un mañana. ¿Te suena? Frente a esto, lo ideal sería que desayunaras algo más consistente y saciante para evitar esa incómoda sensación de hambre constante, que incluso puede influir en tu concentración. Además, los chicles que masticas para paliarla o las barritas energéticas de las que echas mano tampoco son la mejor solución.
Por si te sirviera de inspiración, aquí tienes varios desayunos saciantes que se hacen con pocos ingredientes, para que ni tu bolsillo ni tu tiempo se vean excesivamente afectados por el cambio. Además, como hay tantos desayunos como personas (no todos tenemos las mismas ganas de comer a primera hora), encontrarás opciones para todos los gustos: desayunos saludables, otros más ligeros e incluso otros perfectos para recargar las pilas. ¿Cuál de todas se adapta más a ti?
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