Cocinar en un horno es uno de los básicos para ahorrar tiempo e incluso calorías. Sin embargo, se suele decir que su consumo energético es elevado, convirtiéndolo en uno de los principales inconvenientes para utilizarlo con más frecuencia. Nosotros queremos seguir con nuestro reto de ahorro en la factura de la luz a través del buen uso de nuestros electrodomésticos. Y es que hay muchos tips para ahorrar si organizas bien tu cocina, pero también puedes reducir el gasto de los electrodomésticos con un uso responsable.

Consejos para que tu horno gaste menos

  • Comprueba que el horno está en buen estado. Y con ello nos referimos a que el ventilador funcione correctamente, que las puertas cierren bien y las gomas no estén dañadas, así como que el termostato falle. Cualquier pieza en mal estado hará que gaste más energía. Aquí encontrarás 8 consejos para que tu horno dure más.
  • Ubica el horno lejos del frigorífico, ya que puede afectar a su rendimiento. Si no queda más remedio que colocarlos el uno junto al otro, se recomienda colocar un panel aislante entre ambos electrodomésticos.
  • Cuando lo pongas a funcionar, te recomendamos que cocines varios alimentos al mismo tiempo. Aprende a distribuirlos en las bandejas según la cantidad de calor que vayan a necesitar. Además de ahorrar mucha energía, también tendrás más tiempo extra.
  • Deja la puerta cerrada. Los hornos modernos tienen una luz con la cual podemos ver claramente el interior. Cada vez que abres la puerta, debe volver a trabajar para mantener la temperatura y su gasto energético puede elevarse hasta un 20%.
  • Descongela los alimentos antes de meterlos al horno, de esta forma reduces el tiempo de cocción y, por lo tanto, el consumo. Pasa la comida del congelador a la nevera una noche antes.
  • Utiliza recipientes aptos y saludables para el horno, principalmente de vidrio o de cerámica, ya que tardan muy poco en calentarse y eso ayuda a que los alimentos se cocinen más rápidamente. Los de silicona también son resistentes a las altas temperaturas.
  • Apaga el horno un poco antes de que tus platos estén listos. Con el calor residual terminarán de cocinarse y esos minutos de menos se notarán en la factura.
  • Si vas a hornear verduras, puedes ahorrar un poco de energía precociéndolas unos minutos antes de meterlas al horno.
  • Para asar carne, pollo o verduras y hacerlo en menos tiempo, puedes usar pinchos de acero inoxidable. Quedarán dorados y se cocinarán de forma homogénea al no tener ninguna superficie que les impida el paso del calor.
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Cuáles son los hornos que menos consumen

Un horno puede suponer más del 8% del consumo eléctrico de un hogar. Los hornos, al igual que otros electrodomésticos, se clasifican con las etiquetas de clase energética con letras de la A a la G. La A+++ es la más eficiente y la G la que menos. Tenemos los mejores consejos si quieres saber cómo elegir un horno.

Tres trucos para limpiar el horno

Hay muchos trucos para limpiar la cocina y dejarla impecable, pero el horno es no de esos electrodomésticos que siempre despierta la pereza. Para dejarlo como nuevo, te damos un paso a paso para limpiar el horno y que parezca nuevo. 

  • Mezcla 250 gr. de sal y medio libro de agua. Extiende la mezcla en el horno, deja actuar 20 minutos y enjuaga con un trapo húmedo y limpio.
  • En un pulverizador añade agua, vinagre y bicarbonato. Rocía el interior del horno y ponlo a funcionar durante 10 minutos a unos 120 ºC. Después pasa una bayeta húmeda y adiós restos y olores.
  • Pon un pulverizador una cucharada de bicarbonato en un vaso de agua y impregna tu horno con la mezcla. Déjalo actuar toda la noche y al día siguiente límpialo con una esponja.

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