Comprarse una casa es un paso realmente importante en la vida de una persona, y es normal que ocasione muchos quebraderos de cabeza hasta llegar a concretarlo. Además, la situación actual hace que todavía entren más dudas sobre si es el momento adecuado o tal vez sea conveniente esperar.

Para intentar despejar alguna incógnita, a continuación te desvelamos algunos de los factores que van a influir en el futuro de la vivienda nueva y otras tendencias del sector.

¿De qué depende el precio de la vivienda?

En los periódicos suelen leerse noticias del tipo "Sube el precio de la vivienda" con la consiguiente preocupación que ello conlleva. Pero ¿qué es exactamente lo que condiciona esa subida? En la teoría clásica los precios dependen en general de tres factores fundamentales: los costes, la competencia y la demanda.

Muchas veces se simplifica hablando de la ley de la oferta y la demanda, que correspondería al segundo y al tercero. Más competencia, más cantidad de pisos, los precios bajan. Más demanda, los precios suben.

Costes y tipos

Los costes, aparte de los materiales de construcción en la vivienda que afectan coyunturalmente ahora, también deben incluir el tipo de interés del dinero. Pero cuidado porque:

  • Un tipo alto hace incrementar el coste y el precio, pero si es muy alto llega a reducir la capacidad de producir de las constructoras con lo que reduce la oferta y por lo tanto también incrementa el precio. Pero si sube más el tipo, nadie compra porque sale el piso más caro y entonces se derrumba el mercado y caen los precios.
  • Por otro lado, tipos bajos incentivan a endeudarse y por lo tanto aumentan la demanda y la producción de vivienda con lo que los precios se mantienen bajos. Si ese aumento de producción agota el suelo urbano disponible entonces tenemos mucha demanda y poca oferta, con lo que los precios se disparan.
El futuro de la vivienda.

Comprar o alquilar están dejando de ser las únicas opciones y se abren paso otras tendencias.

Alejandra Cifre vía Unsplash

ALQUILER Y OTRAS TENDENCIAS

El alquiler sigue la misma lógica pero también actúa como sustitutivo cuando los precios de la compra están muy altos. Es una solución temporal en España ya que somos de cultura propietaria; este tema en otros países es totalmente distinto.

Si a esa mentalidad le sumamos los cambios en las tendencias de estilos de vida, podemos observar cómo en el mercado están creciendo otras formas de convivencia. Entre las opciones de comprar y alquilar aparece un amplio abanico de posibilidades que buscan priorizar las necesidades de cada cual.

EL COHOUSING

El cohousing o vivienda colaborativa es una forma incipiente de probar modelos de viviendas distintas más modernas por el que personas con rentas más limitadas podrían tener acceso a vivienda muy buena. En realidad es una fórmula que viene de países más ricos; en concreto surgió en Dinamarca en los años 60 y 70 y fue expandiéndose en los 80 a otros países europeos y Estados Unidos, donde está más arraigada.

El coliving sería una tendencia similar con la salvedad de que los inquilinos están de alquiler en vez de ser propietarios y no adquieren el mismo compromiso pudiendo marcharse cuando quieran.

EN CONCLUSIÓN

En cuanto al futuro de la vivienda propiamente dicho, podríamos resumir que los tipos de interés al alza a corto plazo se traducirían en un coste más elevado y frenada de demanda y, de seguir subiendo, podríamos hablar de crisis inmobiliaria. Hablar de medio plazo con una guerra en Europa resultaría bastante complicado.

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