A la hora de perfumar la casa, tenemos muchísimas opciones disponibles en el mercado, siendo el formato mikado uno de los favoritos gracias a su simplicidad y elegancia. Por si no conoces este tipo de ambientador, se trata de un frasco de vidrio, o de cerámica, que viene lleno de una solución con aroma y varias varillas de ratán o bambú insertadas.
Estas varillas, al estar en contacto con el líquido perfumado, lo absorben y lo dispersan lentamente en el aire, proporcionando un aroma continuo y sutil en la habitación donde esté colocado. Pero, ¿qué pasa cuando el líquido aromático se acaba? ¿Tenemos que despedirnos de su tarro? ¡Con lo resultón y bonito que es? Pues no, puedes quedarte con él y darle un nuevo uso inspirándote en estas 3 ideas.
Ideas para reutilizar los ambientadores de mikado
Antes de ponerte manos a la obra a transformar tu tarrito de ambientador mikado recién acabado, es necesario que lo limpies bien. Para ello:
- Paso 1. Vacía cualquier residuo líquido en un recipiente desechable.
- Paso 2. Llena el tarro con agua caliente y déjalo reposar unos minutos para aflojar los aceites restantes.
- Paso 3. A continuación, añade detergente para platos y frota bien el interior con un cepillo de botella o esponja, asegurándote de limpiar también la boca del tarro.
- Paso 4. Enjuaga con agua tibia y, si quedan todavía residuos o olores, repite el proceso.
- Paso 5. Si quieres también desinfectarlo, puedes sumergir el tarro en una mezcla de agua y vinagre blanco o aplicar alcohol isopropílico y enjuagar bien después.
- Paso 6. Para terminar, deja que el tarro se seque completamente al aire, colocándolo boca abajo sobre una toalla limpia.
Y ahora sí. aquí te dejamos 3 ideas para reutilizar los tarros de los ambientadores de mikado cuando se te gasten:
1. Para crear un mikado con un nueva fragancia
Como primera idea, puedes reutilizar estos tarros para crear un ambientador de mikado con una nueva fragancia. Para ello, llena el tarro con una mezcla de aceite base, como aceite de almendra o jojoba, añádele unas gotas de tu aceite esencial favorito e inserta unas varillas de ratán o bambú nuevas (en Amazon las venden).
2. Como minijarrón para tus flores
Los tarros de ambientadores de mikado vacíos y limpios son ideales para reutilizar como pequeños jarrones decorativos. Puedes colocar flores frescas o secas en ellos para añadir un toque natural a cualquier espacio. Si el tarro es transparente, también puedes agregar unas piedras decorativas, cuentas de vidrio o arena en la base para darle una apariencia con más estilo.
3. Como portalápices
Ahora que la vuelta al cole está pisándonos los talones y estamos comprando todo el material de papelería nuevo para estrenarlo en septiembre, podrías organizar el escritorio de los niños, o el de tu oficina, gracias a estos tarros de mikado. Solo necesitas limpiarlos bien siguiendo el paso a paso anterior y, si lo deseas, puedes pintar el exterior o envolviéndolos con cuerda o cinta para decorarlos. Puedes guardar en ellos lápices, colores, pinceles, bolígrafos, etc.