Cualquier rincón o cuarto, por pequeño que sea, con acceso independiente, puede transformarse en vestidor. A menudo se supedita en favor de una habitación de invitados, un estudio o hasta para usarlo como trastero. Pero, piensa: ¿qué utilizarás más en tu día a día? Bien organizado, como has visto, un vestidor puede ser polivalente en muy poco espacio. ¿Te animas a crear tu vestidor en una habitación pequeña?
Toma medidas
Es lo primero que debes hacer antes de comenzar. Mide el espacio disponible para organizar la ropa. Aquí te detallamos las medidas estándar para cada área:
- Para prendas largas, unos 160 cm disponibles de logitud.
- Para prendas cortas, entre 75 y 90 cm de alto.
- Las camisas necesitan 50 cm de ancho y 45 cm de alto.
- La altura ideal de las gavetas es de 16 cm.
- Las baldas para jerséis deben disponer de 30 cm de distancia entre ellas.
- Los módulos pantaloneros y falderos con guías hidráulicas, las barras telescópicas y las extraíbles son esenciales para aprovechar el fondo del armario, que normalmente mide unos 60cm.
- Y para rincones difíciles, con un ángulo de 90º, las repisas a distintas alturas y las bandejas extraíbles sacarán el máximo partido.
Si tienes un baño con 3 m de ancho, puedes convertirlo en un baño con vestidor (es una idea para crear un mini vestidor al que seguro sacarás partido). Aprovecha una planta alargada para planificar un armario de pared a pared en paralelo a la zona de lavabo.
Ten en cuenta que el fondo de los armarios es de 60 cm y que delante debes contar con algo más de 120 cm: para abrir las puertas, pasar y vestirte, más el espacio necesario para los elementos del baño.
Las distribuciones más habituales de los armarios en vestidores pequeños son en L, en U o en línea, ya que se deja un espacio central necesario para la circulación y para cambiarse cómodamente.
Planifica muy bien su interior
En mini-vestidores este aspecto es imprescindible. Hemos visto imágenes que seguro que han servido de inspiración para imaginar cómo sería tu vestidor en ese pequeño hueco con el que cuentas (aunque no lo creas, tienes hueco).
Analiza primero tu ropa: si predominan camisas y chaquetas, necesitarás más barras que si tienes más camisetas o jerséis. En general, es mejor tener la ropa colgada que doblada si quieres evitar arrugas. Además, las barras son más económicas que las baldas.
Ten en cuenta que para ropa doblada te basta con baldas que cuenten con una altura de unos 30 cm, aunque si quieres guardar elementos más voluminosos calcula unos 60 cm. Asimismo, puedes sustituir las puertas por unas cortinas, lo que reduce el presupuesto del armario.