No te agobies en un piso pequeño: 12 ideas geniales que hacen que parezca más grande

Es sinónimo de amplitud, ligereza y espacio. Pero también potencia la sensación de limpieza. El color blanco engañará a tus ojos y hará que tu salón parezca mucho más grande de lo que es. Por supuesto, debe ir en las paredes (si te resulta muy frío, siempre puedes elegir un blanco hueso o roto). Después, elige un sofá blanco o de un color neutro suave, así como muebles también blancos o de maderas blanqueadas. 

Es el problema del blanco. Que puede resultar frío y desangelado, casi de hospital. Por eso, apuesta por telas gustosas y con textura, así como materiales cálidos, como la fibra natural y la madera. No te olvides también de añadir algún detalle en color. Para ello utiliza los cojines, plaids y adornos decorativos. 

Para que la sensación de amplitud sea mayor, es preferible que los armarios y muebles lleguen hasta el techo. Y, si es una librería de obra o armario empotrado, píntalo del mismo color que las paredes. Así parecerá que se funde con ellas y pasará más desapercibido, haciendo que el espacio parezca más grande. 

Hay materiales que multiplicarán la luz y ayudarán a que esta viaje libremente por tu piso pequeño. Una de las más elegantes y sofisticadas es el cristal. Así, apuesta por una mesa de centro de cristal. Si te resulta demasiado moderna, trata de elegir una que, al menos, tenga el sobre de este material. Y lo mismo con la mesa del comedor. 

Cuando los metros escasean, es preferible elegir menos piezas y más voluminosas que muchas y más pequeñas, que podrían provocar que el espacio resulte abarrotado. Un sofá rinconero será mejor que dos individuales y, además tendrás más asientos en los que sentarse. 

Y es que con un banco a medida bajo la ventana aprovecharás un espacio muerto y conseguirás un rinconcito (solo para ti). Y bien puedes encargarlo a medida con almacenaje o hacerte con un mueble que también tenga sitio para guardar. Para que tu mirador sea más cómodo, añade un topper y varios cojines. 

Al igual que las superficies de cristal ayudan a que la luz viaje libremente por tu piso, los espejos la reflejan. Y cierto que no tienes por qué poner un gran espejo como el de este salón tipo ventana (que ¡nos encanta!). Puedes decantarte por modelos más pequeños. La clave es colocarlos ahí donde puedan reflejar la luz, ya sea frente a una ventana o en la pared perpendicular a esta. 

Si quieres, claro. En un dormitorio pequeño, una manera de hacer que parezca más grande es elegir unos frentes de armario del mismo color que las paredes. Si, además, seleccionas un diseño sencillo, sin tiradores su imagen será más discreta.  

O quitando las puertas. En cualquier caso ganarás un metro cuadrado del espacio que ocupa una puerta abatible al estar abierta. Y esta opción sirve para cualquier puerta de tu casa: las del salón, la cocina, el pasillo... 

Otra opción para aprovechar el bajo de una ventana es utilizarlo a modo de office. Para ello, planifica en uno de los lados un banco con almacenaje (lo puedes usar para guardar las mantelerías o los cojines, por ejemplo). Después, coloca una mesa contra la pared y un par de sillas ligeras que puedas mover.    

Una de las nuevas tendencias tanto en baños como en cocinas es emplear revestimientos y pavimentos de gran formato. Al haber menos juntas, el espacio gana en sensación de amplitud. Y no tienes por qué prescindir de otros materiales, como el papel pintado que decora la pared del lavamanos en este baño. 

Para que tu piso pequeño de más sensación de amplitud, trata de elegir muebles de formas orgánicas y huye de las líneas demasiado rectas y rígidas. Las formas redondeadas en mesas, butacas y elementos como el cabecero portarán dinamismo y mayor ligereza.