Más de 30 ideas de estores para todas las estancias

He aquí un estor tipo paqueto. Empezamos por este concepto que es similar al plegable pero sin varillas. Eso hace que el tejido tenga una caída más natural e irregular. El resultado es desenfadado. Se recoge con un cordon que atraviesa unas anillas cosidas a las cintas verticales que lleva por la cara que no se ve. Si estos estores son perfectos en cualquier estancia de la casa, en el salón no pueden gustarnos más.

Los tejidos ideales para vestir las ventanas del salón son los que dejan pasar la mayor cantidad de luz posible, por lo general. Es una estancia que se usa de día y de noche. Un estor en un tejido ligero tamizará la luz sin restar luminosidad y dará algo de intimidad si lo bajamos por la noche. Por lo general, no es necesario que oscurezca la estancia demasiado.

La solución para los salones más luminosos en los que durante las horas centrales del día la cantidad de luz es extrema es instalar dos estores en las ventanas. Esta solución se usa a nivel estético para dar protagonismo a las ventanas pero también para oscurecer cuando se necesita. Debes combinar un estor más oscuro con otro más claro, como en este ambiente.

El estor plegable es otro tipo que se realiza con tela (las más finas no suelen recomendarse porque se pliegan mal) y que su forma de recogerse es mediante pliegues en forma de tabla horizontal ancha. No tiene el acabado irregular del estor paqueto. Es más "ordenado" porque lleva varillas (este detalle hace que cuando los lavas tengas que retirar la tela de las varillas y después volver a montarlas).

¡Sin problema! Lo bueno de un estor hecho a medida es que se adapta al espacio exacto de la ventana de tu salón, incluso a su forma. Este ambiente abuhardillado es un ejemplo perfecto para que veas el resultado. La ventana tiene la forma del techo y el estor se adapta perfectamente.

Tanto los estores tipo paqueto como los plegables pueden ir instalados a techo o a pared y no tienen una estructura superior que sobresalga -como ocurre con los estores enrollables-, por lo que si quieres colocar dos estores juntos en la misma ventana para que se muevan de forma independiente, quedarán prácticamente pegados (algo que no ocurre con los enrollables donde quedan siempre al menos 5-6 cm entre estor y estor).

En este salón puedes ver el efecto que tiene el estor enrollable (¿ves el espacio entre estores?) Son algo menos cálidos que los de tela, ya que necesitan tener cierta rigidez en el tejido para enrollar bien -se denomina tejido encerado o plástico-. Podríamos decir que son más modernos. La ventaja del tipo de tejido más común, tipo screen, es que hace de pantalla, matizando la luz y evitando reflejos. Los hay de diferente grado de opacidad, que dejan pasar más o menos luminosidad y dejan ver sin ser visto.

Quizá no es de los más usados para vestir las ventanas del salón, pero también se pueden usar. La ventaja es que permiten regular la entrada de luz, inclinando en mayor o menor medida las lamas con una varilla. La desventaja es que éstas acumulan polvo y hay que limpiarlas una a una. Pueden ser de madera o metálicos. Son más cálidos los primeros. Combinados con caídas a los lados, el resultado es más clásico.

La ventaja principal de instalar cualquier tipo de estor para vestir una ventana es que puedes regular la cantidad de luz del salón. Es cómodo hacerlo, ya que solo tienes que subir o bajar. Pero si en el salón tienes un ventanal con un mueble delante o cualquier elemento bajo que haya que salvar, entonces es indispensable, porque las cortinas siempre deben llegar al suelo.

Cualquier tipo de estor viste la ventana perfectamente por sí solo, pero si quieres acompañarlo de caídas, puedes hacerlo perfectamente. Una a cada lado para ventanas que lo permitan por ubicación o una sola si uno de los lados queda pegado totalmente a otra pared. Es solo cuestión de estética, aunque piesa que cuanta más tela tenga la ventana, más "abrigada" estará: proteges el interior del salón del frío.

Si tu salón tiene varias ventanas, lo mejor es que vistas todas con el mismo tipo de estor y en idéntido tejido y color. Así darás unidad a toda la estancia. Aquí se ha hecho así, con estores tipo paquete o paqueto en tono tierra. Es interesante, en estos casos, saber cuáles son las telas que menos se arrugan.

Es otro de los ambientes de la casa que se pueden decorar con estores, uno o varios según el ventanal. En este comedor, donde en lugar de ventana hay una galería tipo mirador, cada paño tiene un estor a medida, tipo plegable.

¿Sabías que los estores de screen permiten el ahorro energético y proporcionan confort térmico tanto en invierno como en verano? Así que si el comedor está colocado cerca de una ventana que recibe mucho sol en verano o es fría en invierno, piénsatelo bien.

Es elegir el color de los estores (en este comedor enrollables tipo screen) igual que el de la pared. Se mimetizan y se crea una sensación de continuidad. En este tono topo el efecto es muy confortable y elegante.

El ancho del estor debe ser el de la ventana, tomando las medidas del borde exterior del marco, más unos centímetros. De esta manera no se verá la perfilería cuando lo instales. Si la ventana o puerta tiene tirador, el estor deberá salvar esa distancia que sobresale.

Este tipo de estor se plisa mediante muchas tablillas o dobleces pequeños. Permite recogerse cuando el espacio de recogida es pequeño porque se levanta todo y ocupa muy poco, de manera que no quita luz a la ventana.

Para una estancia como la cocina, en la que se concentran muchos olores, los estores más aconsejados son los tipo screen, ya que no se deshilachan y no desprenden olores. Además, es un material ignífugo y se limpia con facilidad. ¿Alguien da más para hacerlo idóneo para la cocina? Un estor de screen siempre es enrollable. De hecho, las telas para realizar enrollables han de ser especiales (más rígidas, enceradas o plásticas).

Como es frecuente usarlos en la cocina, debes saber que el screen es apropiado por su facilidad de limpieza, además de lo ya mencionado. Se trata de un tejido vinílico muy resistente confeccionado en poliéster de alta tenacidad y recubierto de PVC. Pasa el aspirador una vez al mes para eliminar el polvo. Para quitar manchas, retira el tubo del estor, estíralo en una superficie plana y rígida y frota con un paño húmedo y jabón. También puedes aplicar un quita grasa diluido en agua.

También es frecuente ver las ventanas vestidas con estores de lamas en la cocina. Se evitan los tejidos que absorben los olores y se puede regular la entrada de luz. Se limpian fácilmente con un paño húmedo, tanto los de madera como los de metal. Pero el engorro es tener que limiar lama a lama. Es preferible pasar el aspirador previamente para eliminar el polvo.

No es el más recomendado, pero no está prohibido. En el caso de que te decantes por la innegable calidez de la tela para decorar la ventana de la cocina, hazlo con un sistema paqueto que te permita lavar fácilmente siempre que lo necesites ya que los tejidos absorben los olores. Evita el estor plegable o plisado. 

Si en la cocina es importante que tengas en cuenta que el estor se pueda limpiar, en el office, y más si hay niños pequeños, es fundamental. Es fácil que salte el tomate o que una mano no muy limpia acabe "estampada" en el estor. Así que tenlo en cuenta. En este, por ejemplo, se ha optado por un estor de lamas en blanco.

Es raro ver una ventana de cocina con cortinas. Los estores son su solución porque en la mayoría de los casos debajo de la ventana hay encimera o una barra, como en ésta. En blanco, deja pasar la luz y permite levantarlo con facilidad para disfrutar de las vistas mientras se desayuna.

¡También vale! En el office de esta cocina ha sido la opción escogida por las decoradoras. Se buscaba el contraste y, sobre la parte superior de la pared pintada en gris oscuro, destaca el arrimadero en color blanco y la ventana con perfilería y estor de lamas en el mismo color.

Los estores pueden cubrir una altura desde el techo hasta el suelo, como en esta cocina. La salida al jardín se realiza desde la puerta junto al office, de sistema corredero. Se han instalado dos para que se puedan subir y bajar de manera independiente. Así, uno puede mantenerse bajado mientras el de la hoja que se vaya a abrir se sube. 

Con un estor plegable o paqueto debes tener en cuenta que en la zona superior ha de quedar un hueco pegado al techo y sobre la hoja de la ventana para que se recoja. Es el que más abulta porque toda la tela se pliega arriba. Si la puerta o ventana es corredera, no importa; pero en el caso de los sistemas de apertura abatibles hay que tener en cuenta que salve esa distancia para que no roce.

Los estores de tela son más cálidos para el dormitorio que los de tejido screen. A continuación veremos cuándo es más apropiado este tipo, pero los paqueto o plegables aportarán un extra de confort al ambiente. Puedes escoger colores neutros o uno que combine con el resto de la ropa de cama. Piensa que los tonos intensos hacen que toda la estancia adquiera ese matiz cromático.

En el caso de que quieras evitar brillos o que quieras jugar con el nivel de intimidad del dormitorio, los estores tipo screen son apropiados porque tienen diferentes grados de apertura, y esto hace que sean más o menos opacos. Además te permiten ver el exterior sin que te vean, algo que te asegura la privacidad en el dormitorio. 

La misión de estos elementos es regular la entrada de luz y poder dejar el dormitorio a oscuras. Así evitas que la luz interfiera en el descanso. Con los estores adecuados puedes lograr oscurecer por completo una estancia. Son los enrollables opacos.

Este es un ejemplo de dormitorio con estor enrollable en blanco. Este se usa para regular la entrada de luz y ganar intimidad, aunque no se pretende destacar su presencia, ya que la bonita carpintería de madera es la protagonista. 

Las galerías permiten ocultar el inicio del estor o las cortinas cuando van instaladas en rieles, ya que son poco estéticos. En este dormitorio se han combinado en la ventana las caídas laterales con un estor central, todo en el mismo tejido y color.

En este rincón del vestidor de un dormitorio, el estor enrollable gana en calidez con un par de caídas en tono tierra a cada lado. De esta manera, el estor en blanco matiza la luz sin darle color al interior de la estancia y las caídas coordinan con el acabado predominante.

Que en estores paqueto o plegables, en telas ligeras, cuando estén estirados "notarás" las varillas y cintas del mecanismo. Es algo normal, pero debes saberlo porque si lo que quieres es un efecto pantalla liso y sin marcas, entonces debes optar por un estor enrollable para el dormitorio.

Los estores no lo hacen, ya que el alto total es la distancia que va desde el techo (o desde el punto más alto de la pared en la que lo vayas a colocar) hasta 2 cm antes del suelo. Ten en cuenta que quedará totalmente estirado, pero los paquetos y los plegables no se verán tan lisos como los enrollables.

Cuando hay una ventana cerca de una zona de estudio conviene que haya un estor para matizar la luz, pero, si además se va a usar el ordenador o trabajar con una pantalla, los tejidos tipo screen evitan reflejos molestos.

En este rincón de estudio y trabajo se ha vestido la ventana con un estor paqueto en tono arena suave, muy en la línea natural del interiorismo elegido. Colocar el escritorio delante de la ventana es un buen lugar para descansar la vista y proyectarla sobre el horizonte, pero ¡ojo! que puede ser un motivo de distracción. De ahí también la importancia del estor.

Como en la cocina, los estores en el baño deben cumplir unos requisitos: que se puedan limpiar fácilmente (por manchas de algún cosmético) y que soporten bien la humedad. El screen (estor enrollable) -que es antibacteriano- y los modelos de lamas son apropiados. Sobre todo, evita la tela en caso de que pueda mojarse porque la ventana está cerca del lavabo o de la ducha.

Los estores enrollables también se realizan a medida. Algunos modelos de los que compras en tamaños estádar también puedes cortarlos tú misma de forma sencilla (suelen incluir el paso a paso sobre cómo hacerlo). Es intererante saberlo porque, en ocasiones, las ventanas del baño pueden -como aquí- estar metidas en un muro donde no hay espacio más allá del ancho de la ventana para instalar el estor.