El armario perfecto según su edad: bebé, niño y adolescente

Desde bebé hasta preadolescente, pasando por su etapa de niño cambia el tamaño de su ropa cambia, el tipo de prendas y sus necesidades. Por eso es importante saber cómo debe ser el interior de los armarios y su distribución

“Independientemente de si el armario es para un bebé, para un niño o para un adolescente, lo más importante es adaptar su diseño a las necesidades de cada uno que, según el caso, seguro que será diferente” destaca Susana Gil, fundadora de la firma de mobiliario infantil y juvenil Piccolo Mondo.

A la hora de planificar el diseño de un armario, no hay que pensar que por ser para un bebé debe ser pequeño. El bebé crecerá rápido y necesitarás más espacio. Y además, de bebé, aunque su ropita es pequeña, se acumulan muchos otros complementos y accesorios que precisan de un hueco en casa. “Lo más importante con un armario, sea a medida o exento es que, si se tiene espacio, es preferible diseñarlo lo más grande posible para así ganar almacenaje”, matiza Susana.

Si te planteas colocar un armario para el bebé que luego cambiarás más adelante, desde Garabatos aconsejan que no sea demasiado alto, “de 1,80 m será suficiente, con varios cajones para zona de distribución de ropita, con una barra no muy grande para colgar y más estantes para colocar.”

Para un niño o niña debe ser más alto y ancho, con una zona de colgar de lado a lado del armario y dos cajones inferiores. También algún estante. Y para un adolescente, el armario debe ser -preferiblemente- algo más ancho que 1,50 m.

A la hora de elegir el diseño del armario, desde la tienda de mobiliario infantil y juvenil Garabatos opinan que no tenga un diseño muy infantil “para que puede ser útil más años en la etapa del niño.”

Un detalle que es beneficioso para todos en la familia es que cada espacio del armario infantil o juvenil, para el niño o niña y adolescente esté a la altura de ellos. Así les ayudará a ser independientes y guardar y organizar la ropa y accesorios ellos mismos.

Claves para distribuir el interior del armario

1. BARRAS

Un truco: donde cabe una barra para adulto, caben dos o incluso tres para colgar ropa de niño.

2. ESTANTES

Planifica bastantes baldas, si cuando crezca el niño no se necesitan tantas, se pueden quitar fácilmente. Para la ropa pequeña es más práctico tener bastantes compartimentos o divisiones que un espacio de mucha altura que solo hará que las pilas de ropa se puedan derrumbar.

3. CAJONES

De pequeños son perfectos para toda la ropa e incluso zapatos. Pero a medida que crece el bebé serán solo para camisetas y jerséis del niño. De adolescente, solo camisetas. Si el cajón tiene más fondo, podrás guardar jerséis.

4. ZAPATERO

De bebé ni pensarás en él pero ya el niño necesita uno. Servirá una cesta extraíble, algún estante o la zona baja del armario. Pero el adolescente tendrá zapatos más grandes y deberás tenerlo en cuenta. Además, ya es más habitual guardar a esta edad los zapatos en cajas.

5. OTROS

Niños, niñas y adolescentes precisan de un espacio dentro del armario, si no tienes otro hueco, para que dejen la mochila del colegio y las bolsas de sus actividades deportivas. Estos accesorios serán más grandes y, por tanto ocuparán más, según crezca tu peque.