1. Antes: todo por hacer Cuando vives sola o en pareja, un piso con tres habitaciones y dos baños puede convertirse en todo un mundo. La propietaria de este dúplex lo tenía claro: quería reconvertirlo en un pisito más acogedor . ¿Su apuesta? Empezamos por la planta baja que, con la ayuda de Natiu Studio , se abrió para dar paso a la luz. Después: colores neutros y rincones cálidos En el salón, se optó por "un mobiliario y una decoración en colores neutros, materiales nobles y líneas rectas . Siempre combinándolo con tejidos claros y fibras naturales, como rafia, lino, algodón, bambú, etc.", explican desde el estudio. 2. Antes: poca intimidad Enfrente, nos encontramos con lo que iba a ser el comedor. Tiene dos grandes ventanales, que proporcionan muchísima luz natural. "El balcón da al patio de manzana, por lo que podemos afirmar que es un oasis de paz, donde no se oye ningún ruido de la calle", recuerdan los artífices del proyecto. Despúes: una separación bien resuelta ¿Qué hicieron aquí? Para dividir las dos zonas, diseñaron una estructura de listones de madera lacados en blanco, "de forma que, además de separar sin cerrar el espacio, permitía colocar la televisión y las instalaciones sin que quedaran a la vista", detallan. 3. Antes: una cocina oscura y cerrada La cocina original era independiente. "Eso provocaba que fuera una estancia muy muy oscura, ya que da a un patio interior", continúan. Así que decidieron abrirla al salón. ¿El premio? ¡Más luz! Después: más luz en la cocina Ahora bien, solo la abrieron a medias, lo cual les permitió ubicar las instalaciones. "También cerramos la parte de arriba con unas ventanas practicables de hierro y reubicamos la puerta. La hicimos corredera entre tabiques -del mismo material que la ventana- para dar continuidad", explican desde Natiu Studio. Abierta y cerrada De esta forma, ganaron muchísima luz en la cocina sin perder ni un solo metro cuadrado. ¿Una idea para copiar? El juego de las ventanas, que permite abrir o cerrar en función de lo que necesites en cada momento. 4. Antes: un espacio mal aprovechado Al subir hacia la planta superior, te encontrabas con un amplio espacio con techos a dos aguas que daban a una terraza, otra estancia anexa y una salida a otra terraza. ¿Adivinas en qué se transformó? Después: un vestidor amplio y coqueto Este lugar diáfano pasó a ser el vestidor. Desde Natiu Studio, optaron por instalar unos módulos de armarios abiertos , junto con unas cómodas con cajones. ¡Qué práctico! 5. Antes: habitaciones sin personalidad Dejaron una habitación más amplia para crear el dormitorio. Por un lado, cambiaron la puerta de paso. La hicieron más alta y la substituyeron por una corredera. Pero, ¿qué más hicieron? Después: un dormitorio lleno de detalles Lo decoraron en línea con la planta baja. "Escogimos elementos cálidos y neutros, como el cabecero y las lámparas de ratán , el banco de madera o la ropa de cama de lino", cuentan. ¿Un detalle? Para acabar de vestir la estancia usaron pintura a la cal . 6. Antes: demasiado espacioso Al redistribuir la planta, consiguieron que el dormitorio fuera una estancia muy amplia. Así que encontraron el rincón perfecto para poner en marcha otro de los requisitos de la propietaria. ¡Un nuevo baño integrado! A la hora de diseñar el baño, se dieron cuenta de que, si lo cerraban por completo, no aprovecharían la luz natural de los ventanales. "De modo que propusimos hacer un marco fijo de madera y cristal , tipo estriado, y una puerta corredera con el mismo material", continúan los profesionales. Luminoso, amplio y estiloso La propietaria soñaba con un baño en el que poder relajarse y jugaron con los materiales y la iluminación para conseguirlo. "La baldosa Dassel de Cifre, aporta la calidez de la madera y las baldosas blancas -usadas para el frontal del baño- dan luminosidad con su acabado brillante", indican. Qué atmósfera tan relajante. El plano de la planta baja Antes de la reforma, el piso tenía 3 habitaciones, 2 baños, salón comedor con cocina independiente, zona polivalente, 2 terrazas y un balcón. Pero la propietaria quiso un gran espacio diáfano con más luz en la zona de día. Así que colocó aquí una gran cocina con pasaplatos, comedor y el salón. ¡Este plano es el resultado! El plano de la zona de noche Como decíamos, quiso destinar la planta superior a un solo dormitorio principal con baño y vestidor. Y en este plano puedes ver cómo quedó. Por cierto, este es el presupuesto total de la reforma (con cifras aproximadas): Presupuesto de la reforma Mobiliario y materiales: 23.000 € Obra (industriales): 26.000 € Total: 50.000 € (aprox.)