10 tendencias con encanto para renovar tu dormitorio YA de YA: colchas estilo abuela, cabeceros originales y mucho más

En El Mueble sabemos bien que la mejor manera de dar calidez a las estancias es a través de los textiles, de ahí que los cabeceros tapizados sean siempre una opción que recomendamos de cara a los meses más fríos del año. Sin embargo, este último tramo y de cara a 2025, las tendencias apuntan a que tendremos que poner el foco en la forma del cabecero, porque los de estilo pagoda son los que están conquistando el mercado. Sí, esos de aspecto majestuoso y acabados en punta. Hoteles de lujo, catálogos, proyectos de interioristas y marcas de decoración lo avalan, en su afán por volver a una decoración menos minimalista y ávida de esos detalles que se estaban perdiendo años atrás y, al final son los que dan empaque a un hogar. ¿En cuanto a los tapizados? Desde lisos con ribetes en contraste, rayas sutiles o flores en formato XL. No tengas miedo al más es más.

Siguiendo esta tendencia de mezclas inesperadas, la ropa de cama también tienen un claro caballito ganador: los cojines estampados y con cenefas. Son propuestas que llegan de la mano de IQ Home Collection, que rescata los colores burdeos y mostazas para abrigar los dormitorios de otoño. Y todo, con el halo clásico que aportan las grecas y los estampados florales más elegantes, reeditados para la firma por Gastón y Daniela. Combina unos con otros y verás qué bien que funcionan.

Las casas de montaña llenas de vigas de madera nos trasladan al otoño y nos anticipan la nueva temporada de frío, donde el dormitorio se convierte en refugio. En ellos, los textiles cálidos siempre están presentes, así que, ¿por qué no utilizarlos a nuestro favor para decorar, por ejemplo, los pies de la cama? Fíjate en el calorcito que aporta esta manta de pelo sobre el banco de madera con solo mirarla, ¡apetece sentarse en ella! Es súper sencillo (y barato) cambiar el aspecto de la habitación. 

El revival del otoño llega de la mano de nuestra abuela. Sí, como lo lees. Las piezas decorativas que tenían en sus casa y que forman parte de nuestros recuerdos de infancia vuelven como un boomerang del pasado para crear los ambientes más familiares y acogedores de la temporada. ¿En el dormitorio? Las colchas de antaño vuelven a cobrar protagonismo. Esto se traduce en piezas protagonistas con bordados, tejidos de jacquard o remates de volantes que abrazan la cama y aportan un estilo atemporal que siempre funciona. En Zara Home bien lo saben.

Todos los lectores de El Mueble sabrán la importancia que tiene el papel pintado para dar calidez a una habitación. Sin embargo, en el dormitorio, solemos reservarlo para un solo frente protagonista, el del cabecero. Las tendencias de 2024 y de cara a 2025 siguen apostando por el “más es más”, empapelando cada una de las paredes del dormitorio para generar cohesión y sensación de abrigo.

Salir de la cama y que tus pies se hundan en una gustosa alfombra es una sensación maravillosa para empezar el día. Y es que las alfombras decoran, aíslan, protegen el suelo de la pisada y el frío. Cuando se pretende crear atmósferas más acogedoras y confortables, los interioristas lo tiene claro apostando por alfombras de pelo. En tonos tierra (beiges, marrones, anaranjados…) es ideal para combinar con la calidez de la madera y ayuda a  conseguir un montón de combinaciones y estilos. No olvides de este dato de nuestra estilista Dafne Vijande: “en dormitorios amplios nunca pondría una alfombra de menos de 80 cm de ancho, porque se vería ridícula. En cambio, queda muy bonito una gran alfombra que parta unos 30cm de las mesillas de noche y se prolongue 100-150 cm de los pies de la cama, así se verá un espacio muy vestido y muy acogedor". 

Las cortinas con faldón es contraste es una idea clásica, pero muy decorativa, que ayuda a armonizar el espacio con el resto de elementos de la habitación. Aportan cohesión y se desmarcan de otras opciones, mucho más habituales y visualmente ligeras, que pueden encajar mejor en otras épocas del año. Borgia Conti siempre puesta por los detalles especiales y lo vemos con esta cortina de lino blanco con teja y vivo oscuro, que juega con los tonos del cabecero y la pantalla de la lámpara, creando un ambiente acogedor y otoñal envidiable. Se pueden personalizar tanto en medidas como en combinación de tejido.

¿Cuál es el secreto de una cama gustosa y elegante? Según Sol Van Dorssen, "hay que colocar una base de funda nórdica, sábana de lino o algodón en tono neutro. Después, añade un pie de cama con cuerpo".

En este punto, tenemos desde los plaids acolchados, hasta los toppers o las mantas de punto grueso como la que aparece en esta imagen. "Puedes optar por algún estampado de dibujo pequeño y de tonos suaves aunque sea de color", recalca. Encima, coloca otro plaid o manta de alguna textura diferente. Juega con las capas. ¡Las mantitas nunca son suficientes!

Un dormitorio con un aroma agradable puede mejorar significativamente la calidad de nuestro descanso. No hay nada más acogedor que entrar en una habitación que huele de maravilla después de un largo día. Por eso, las velas perfumadas son una solución funcional y decorativa para tener en cuenta. Sobre una cómoda o la mesita de noche, crearán un ambiente de recogimiento apto para el descanso, además de rincones con mucha personalidad, en el caso de que prefieras poner varias sobre una bandeja bonita, en jarrones de cristal o en soportes artísticos como los que propone Trudon, un experto en velas de alta gama fabricadas en Normandía, que incluye este clásico de la firma, disponible en todos los aromas. Su cubierta de vidrio en color caldera es perfecto para esta temporada del año.

Un sencillo cambio de textiles es suficiente para cambiar el ambiente de una habitación. ¿En otoño? Con ciertas pinceladas mostazas, ocres y amarillas sería suficiente. En este dormitorio han subido aún más su nivel combinándolo con el tono estrella de este año: el gris antracita en colcha, cojines y papel texturizado. La guinda la pone el banco a los pies de la cama, tapizado en un clásico tartán con el que nos dan ganas de entrar de lleno en otoño.