La fachada es una extensión de nuestra personalidad, de lo que queremos mostrar al exterior y lo que queremos compartir. Por eso, si deseas una casa con estilo propio, ¿te has planteado mostrarlo también en la fachada? Las posibilidades son infinitas: puedes abrir nuevos ventanales para aprovechar la luz natural, cambiar el color de las paredes o introducir materiales nuevos como la piedra, la pizarra u azulejos. ¡Las posibilidades son infinitas!
Si lo que quieres es darle un aire más rústico a tu casa de campo, recuerda que en las viviendas de campo no faltan las flores y la vegetación. También puedes añadir alguna banqueta junto a a la entrada, un detalle que convertirá tu casa en un punto más acogedor.
Experimenta y recuerda que en las casas de campo, cualquier elemento original que puedas recuperar le dará un plus de encanto. Si un viejo granero se ha convertido en una casa de ensueño, si un antiguo cortijo invita a vivir en él sin mover un ápice su estructura original, pregúntate: ¿que tiene tu casa de campo que puedas destacar?