Además de un estilo rústico moderno y muy cálido, todas son increíblemente luminosas, con amplios ventanales que abren las casas a los colores del jardín y de la montaña. ¿Se puede pedir más? Pues sí: en su rehabilitación o construcción han respetado los materiales naturales, como los suelos de barro cocido, la piedra de la zona o los techos de madera. Y si su interior te hace suspirar, el exterior verde y frondoso, con comedores bajo la luz tamizada de pérgolas de cañas o bajo el porche, es de ensueño y una pieza clave en todas ellas. ¿Cuál te inspira más tranquilidad y relax?