La judía verde es una legumbre con alto contenido en ácido fólico y rica en fibra, en antioxidantes como los betacarotenos, en minerales como el potasio y en vitaminas como la C (si no la cocemos en exceso). Pero, a pesar de ser una auténtica joya nutricional para el funcionamiento de nuestro organismo, el sabor de la judía verde tiene poco atractivo para muchas personas ya que la consideran aburrida y con poca gracia. 

Si quieres sorprender a tu familia y amigos con tus próximos platos de judías verdes, apúntate estos 7 aderezos, son muy fáciles de preparar y, con muy poco, subirán el sabor de tus judías verdes. ¡Mira, mira!

7 aderezos para dar un toque de sabor extra a las judías verdes

Si quieres que tus judías verdes, a partir de ahora, se conviertan en un manjar de los dioses para los paladares tanto de niños como de mayores, entonces no dudes en cocinarlas usando los siguientes aderezos. ¡Se chuparán los dedos!

Judías verdes con tofu y manzana

Ingredientes para 2 personas:
200 g de judías verdes finas frescas
200 g de tofu con quinoa, wakame y verduras
1 manzana pink lady
¼ de puerro grande
2 cucharadas de aceite de oliva
2 cucharadas de tahini blanco
una pizca de sal

Lava las judías verdes y quítales las puntas y las hebras si son un poco duras.
El puerro lávalo y córtalo en juliana. Luego corta el tofu en daditos de tamaño mediano.
Calienta una cucharada de aceite de oliva en una sartén grill a fuego medio-alto. Pon las judías verdes, sin amontonarlas, para que se marquen bien. Espolvoréalas con sal. Tras unos minutos dales la vuelta para que se marquen por ambos lados.
Mientras se hacen las judías, pon en una sartén antiadherente una cucharada de aceite de oliva y caliéntalo a fuego medio. Saltea el puerro hasta que empiece a dorarse y sácalo. Pon el tofu y saltéalo 3-4 minutos, lo justo para que se dore ligeramente.
Retira las judías verdes y mézclalas con el puerro y el tofu. Corta la manzana en daditos o en gajos y añádela al plato o bol. Vierte por encima el tahini en el momento de servir.

RBA

 

1. Aceite de oliva virgen extra, ajo y limón

Aunque parezca simple, este aderezo es un potente potenciador de sabor para las judías verdes. Para ello, debes picar finamente unos dientes de ajo y saltearlos en AOVE hasta que estén doraditos. Después, añade las judías verdes ya hervidas y exprime un chorrito de zumo de limón por encima. Quedan muy sabrosas con este toque entre ácido y cítrico.

2. Vinagreta balsámica

Combinar AOVE, vinagre balsámico, mostaza y un toque de miel resulta en un aderezo que equilibra dulzura y acidez. La mostaza le da un ligero toque picante, mientras que el vinagre balsámico y la miel equilibran los sabores.

3. Pimentón ahumado y comino

El pimentón ahumado y el comino son perfectos para dar un toque especiado, profundo y terroso a las judías verdes. Basta con mezclar estos dos condimentos con un poco de AOVE antes de incorporarlos a las judías verdes.

4. Yogur natural y hierbas aromáticas

Para un aderezo más cremoso y fresco, mezcla yogur natural con tus hierbas aromáticas favoritas (eneldo, perejil, o albahaca, cilantro, etc), zumo de limón y una pizca de ajo en polvo. Esta opción le dará a las judías verdes una textura más suave y un sabor más refrescante y ligeramente ácido. 

5. Tahini y limón

El tahini es una pasta de sésamo muy sabrosa y con un sabor terroso muy particular que, cuando se combina con zumo de limón, un poco de ajo y un poco de agua, queda un aderezo de lo más rico gracias al ligero amargo del tahini que se equilibra con la acidez del limón.

6. Salsa de soja y sésamo

Para unas judías con aires asiáticos, mezcla salsa de soja (sin gluten si eres celiaca o sensible al gluten) con aceite de sésamo tostado y un poco de jengibre rallado. Este aderezo le da a las judías verdes un sabor profundo y umami, con el toque de nuez del sésamo y el frescor picante del jengibre.

7. Cebolla caramelizada

La cebolla roja caramelizada añade un sabor dulce y profundo a las judías verdes. Para preparar este aderezo, corta la cebolla roja en rodajas finas y saltéalas con un poco de AOVE a fuego lento. Al dejar que se caramelice lentamente, la cebolla adquiere un sabor natural más dulce, perfecto para equilibrar el sabor neutro de las judías. Al final, mezcla todo y a disfrutar.