Tanto si tienes un huerto urbano, como si has destinado una parte de tu jardín o tu parcela al cultivo de un huerto, sabrás que el verano es la época de más actividad. No solo recolectarás muchos de los productos que has cultivado durante los meses anteriores, pero las frecuencias de riego también se multiplican, el cuidado contra las plagas y el crecimiento de las malas hierbas... Todo es poco para mantener tu huerto urbano a pleno rendimiento.
Pero, ¿sabías que la época de siembra no tiene por qué haber terminado? Hay muchas hortalizas que puedes plantar ahora y que te darán resultados a finales de verano, principios del otoño y hasta en invierno. Estos son los cultivos de verano que podrás disfrutar el resto del año. ¡Toma nota!
Cuáles son los cultivos de verano
Tomates
Aunque lo ideal es hacerlo en mayo, aún estás a tiempo de poder cultivar tomates si en tu zona los veranos suelen alargarse. Puedes hacerlo mediante plantones adquiridos en el vivero en vez de desde las semillas.
Si los has plantado en primavera, podrás comenzar su cosecha en julio y agosto, pero puede alargarse si los cultivaste más tarde y evitas que sufran la bajada de temperaturas de finales de septiembre y octubre.
Lechugas
El mejor momento para plantar lechugas es la primavera, aunque también puedes hacerlo a lo largo del verano, ya que las altas temperaturas pueden hacer que se espiguen. ¡Así que estás a tiempo! Si lo haces ya, podrás disfrutar de su refrescante sabor durante el resto de la temporada e, incluso, durante el otoño. Recuerda que las lechugas necesitan una ubicación de mucho sol, así como mucha agua. Lo mejor de este cultivo es que es uno de los más fáciles que, además, puede durarte toda la temporada: si vas cortando sus hojas cuando la vayas a comer, la lechuga seguirá creciendo el resto de la temporada.
Calabacín
El calabacín es una de las verduras favoritas de muchos por su versatilidad para adaptarse a muchas recetas. Así que, cultivarlo en tu huerto urbano será todo un acierto. Ahora, el calabacín se cultiva a principios de primavera y es en verano cuando se recolecta. Para que crezcan sanos y grandes, necesitará mucho sol, agua y abono.
Remolacha
Algunos vegetales de raíz pueden sembrarse en verano para disfrutar de ellos en otoño, como la remolacha, las zanahorias, los nabos y los rábanos. En el caso de la remolacha, se trata de un cultivo bastante sencillo, siendo lo más complicado germinar las semillas. Para ello, déjalas en remojo la noche anterior a la siembra y siémbralas a unos 30 cm de distancia entre una y otra en un sustrato rico en materia orgánica y con buen drenaje. Y es que el exceso de riego puede ser un problema en el cultivo de la remolacha. Ponlas donde reciba el sol directo. Podrás cosecharlas a las 9 o 10 semanas de sembrarlas.
Rabanitos
Los rabanitos son otro cultivo sencillo que, además, se pueden sembrar en cualquier época del año. Deja unos 7 cm entre las semillas y siémbralas en un suelo rico en materia orgánico, asegurando una humedad constante. ¿Sabías que puedes cultivarlos en maceta siempre que tengan, al menos, 20 cm de profundidad? Pon los rabanitos a pleno sol y, preferiblemente, riega por la noche. Podrás recogerlos a los 20-25 días de haberlos sembrado.
Zanahorias
Otra verdura de raíz que puede sembrarse en verano es la zanahoria. Cultiva las semillas de zanahoria a una distancia de 10-15 cm y a una profundidad mínima de 30 cm. Ponlas en un lugar sombreado, donde no estén a pleno sol durante las horas de más calor de día. El sustrato debe ser algo suelto y con capacidad de retener el agua. Riégala regularmente. Dependiendo de la variedad, podrás tener tus zanahorias entre 10 y 110 días.
Otros consejos para tu huerto de verano
Que tengan feeling
Agrupa bien las variedades para sacarle más partido al huerto. Planta especies que "se ayuden" unas a otras a crecer, como esta combinación de pimientos, tomates, berenjenas... Además, visualmente resultará mucho más atractivo.
Un cajón aromático
Si tienes una mesa de cultivo, aprovéchala para plantar aromáticas. Tendrás a mano un condimento sano y fresco y lograrás un insecticida natural. Si no lo tiene, puedes crear una pequeña separación y colocarlas en una esquina de la mesa.
- Perejil. Crece bien al sol o en semisombra y necesita un riego frecuente. Resiste el frío.
- Albahaca. Necesita calor y humedad sin excesos. La de hoja pequeña es un buen antimosquitos.
- Tomillo. Crece en suelos soleados y secos y resiste muy bien al frío. Ideal para infusiones.
- Menta. No pide demasiado sol y es aconsejable plantarla en solitario porque es muy invasiva.
- Romero. Requiere pocos cuidados. Ideal como condimento culinario y como aromatizador natural.
- Lavanda. Necesita al menos 6 horas de sol al día. Y crece mejor en un suelo bien drenado.
Para sacar el máximo rendimiento, ten muy en cuenta el calendario de cultivo de las plantas. Busca las que más te gustan y comprueba cuál es el mes ideal para plantarlas. Tener un huerto es terapéutico, pues el cuidado de las plantas relaja. Pero también es una fantástica manera de que los niños aprendan cómo crecen las verduras y las hortalizas, se hagan también responsables de su cuidado y disfrutéis de una actividad en familia.
Si te ha entrado el gusanillo, aquí te contamos cómo plantar un huerto. ¿Vives en la ciudad? Pues no te pierdas todas estas ideas para montar tu propio huerto urbano.
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