El árbol de jade, también conocido como crassula ovata, es una de esas plantas que parecen hechas a medida para los hogares: bonita, resistente y capaz de darle vida a cualquier rincón con su peculiar forma de arbolito en miniatura. Pero, aunque su fama de "fácil de cuidar" está más que merecida, incluso las suculentas como esta tienen sus días grises.

Hace unas semanas, mi querido árbol de jade empezó a mostrar señales de alerta: sus hojas, antes firmes y brillantes, estaban arrugándose y perdiendo ese verde vibrante que siempre me había enamorado. ¿Qué estaba pasando? Investigué y di con la solución perfecta gracias a un vídeo de la cuenta de TikTok de @plantasjungay.

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¿Por qué se arrugan las hojas del árbol de jade?

Lo primero que hay que entender es que el jade es una planta suculenta, lo que significa que almacena agua en sus hojas y tronco. Si esas reservas se agotan, la planta empieza a mostrarlo en su apariencia. Por eso, una de las causas más comunes de las hojas arrugadas es la deshidratación: o bien porque te olvidaste de regarla (a todos nos pasa), o porque su sustrato no está haciendo su trabajo correctamente.

Ahora bien, si notas que las hojas siguen arrugadas incluso después de regarla, es hora de pasar a un plan de rescate más avanzado. ¡S.O.S.!

El remedio infalible: una "spa day" para tu planta

El truco que propone @plantasjungay es sencillo pero súper eficaz, y lo mejor es que no necesitas ser una experta en jardinería para aplicarlo.

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Estos son los pasos:

  1. Saca la planta de su maceta: Si el sustrato está demasiado compacto, es probable que las raíces no estén absorbiendo el agua correctamente.
  2. Un baño reparador: Llena un recipiente grande (como un balde o fregadero) con agua a temperatura ambiente. Coloca el árbol de jade dentro, dejando las raíces sumergidas, y déjalo descansar ahí durante 24 horas. Este tiempo permitirá que la planta se hidrate profundamente.
  3. Renueva el sustrato: Pasado el tiempo, es hora de darle un hogar renovado. Prepara una mezcla para suculentas que incluya:

    -Fibra de coco y arena: para un buen drenaje.
    -Humus de lombriz: para añadir nutrientes.
    -Perlita o vermiculita: para airear la mezcla.
    -Compost: para mejorar la retención de agua.
  4. Vuelve a plantar: Llena la maceta con esta mezcla y devuelve tu jade a su lugar. No olvides elegir una maceta con buen drenaje para evitar encharcamientos.


Lo que debes tener en cuenta


El truco es mágico, pero el mantenimiento también cuenta. No olvides regar tu planta cada vez que notes el sustrato seco (introduce un dedo unos centímetros para comprobarlo). Además, asegúrate de que tu árbol de jade reciba luz indirecta abundante, ya que esto también influye en su salud.

Gracias a este sencillo truco, tu árbol de jade volverá a lucir como nuevo: hojas tersas, brillantes y llenas de vida. Ahora sé que incluso las plantas más "indestructibles" necesitan un mimo especial de vez en cuando. 

Cómo decorar con árbol de jade

El árbol de jadeno solo es una planta de fácil cuidado y gran resistencia, sino que también aporta un toque de frescura y sofisticación a cualquier estancia. Aquí te proponemos ideas para integrarlo en la decoración de tu hogar con estilo

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1. En una mesa de centro o auxiliar

El árbol de jade, con su estructura escultural y sus hojas carnosas, funciona como un elemento decorativo que no falla en salones o comedores. Ubícalo en una mesa de centro dentro de una maceta de cerámica esmaltada en tonos neutros o terrosos para un look elegante.

2. En estanterías y librerías

Coloca un árbol de jade de tamaño mediano en una estantería combinándolo con libros de arte, piezas de cerámica y pequeños objetos decorativos. Su textura aporta contraste y vida, especialmente en estanterías de madera o metal.

3. Un toque natural en las zonas de trabajo

En oficinas o despachos, el jade no solo añade un toque decorativo, sino que también simboliza la prosperidad en el Feng Shui. Ubícalo en un macetero de colores claros sobre tu escritorio para sumar frescura y equilibrio sin sobrecargar el espacio.

4. Las macetas como protagonistas

Escoge macetas con carácter para realzar su estética. Las opciones de cemento para un aire industrial, de barro cocido para un estilo rústico o de porcelana en tonos oscuros para un look sofisticado son excelentes elecciones.

5. En entradas y recibidores

Un árbol de jade grande en un macetero alto en la entrada de casa crea un rincón lleno de vida y que ganará en elegancia. Además, según el Feng Shui, colocar esta planta cerca de la puerta de entrada atrae la abundancia.

6. Rincón zen con otras suculentas 

Crea un pequeño jardín interior combinando el jade con otras suculentas como echeverias y haworthias, acompañadas de piedras decorativas blancas o negras. Esta composición funciona bien en repisas, mesas auxiliares o incluso en el baño.

7. Un guiño minimalista 

Su estética sencilla y natural lo hace perfecto para decoraciones minimalistas o de inspiración japonesa. Coloca un solo árbol de jade en una maceta artesanal de gres sobre una mesa baja o un aparador de madera clara para un efecto acogedor.


8. Cocinas con encanto natural

En cocinas con encimeras de madera o piedra, el jade añade un toque verde sin requerir grandes cuidados. Ubícalo en una zona con buena luz, como una repisa cerca de la ventana o en una isla de cocina, acompañado de frascos de vidrio y utensilios de madera. Verás como la estancia gana en calidez al instante.

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