Si cada vez que sacas a tu perro de paseo, te deja la entrada llena de barro y te has cansado de pasarte todo el dia limpiando y de vivir pegada a la aspiradora y la fregona, tenemos una buena noticia que darte. Sí, hemos dicho buena. Y es que hemos recopilado las mejores soluciones para mantener tu entrada impecable y evitar que las patas de tu peludo conviertan tu hogar en un lodazal. ¡Toma nota!

1. Utiliza toallas especiales

El primer truco es colocar una toalla grande justo en la entrada. Tan solo tienes que frotar suavemente cada una de sus patas en la toalla, ¡y listo! Será como si nunca hubiera salido. El secreto está en elegir bien la toalla. Busca una de microfibra que sea superabsorbente y no suelte pelusas. Y recuerda tener siempre alguna de repuesto, para cuando toque lavarlas.

2. Compra alfombrillas para patas

Algunas personas usan tapetes o alfombrillas especiales para perros que, literalmente, "atrapan" la suciedad de sus patas. Son como pequeñas alfombras mágicas que absorben barro, polvo y humedad. Si te interesa esta opción, puedes encontrarlas fácilmente en tiendas de mascotas.

3. Usa lavapatas portátiles

Los lavapatas portátiles son como duchas en miniatura diseñadas para lavar las patitas de los perros, ¡y son perfectos para días lluviosos! Su funcionamiento es muy sencillo: introduces la pata en el recipiente, lo giras un poco y las patas quedan limpias en segundos. Por lo general, estos lavapatas suelen llevar dentro un cepillo de silicona suave que elimina la suciedad, y son totalmente seguros, pero hay que lavarlos después de casa uso.

Perro feliz
iStock

4. Planifica los paseos en momentos y lugares secos

Otra opción es programar los paseos en momentos donde el suelo esté más seco, evitando salir justo después de la tormenta. En épocas de lluvia, puedes alternar paseos cortos con juegos en casa para mantener a tu perro activo.

5. Mantén el pelo entre las almohadillas recortado

Si tu perro tiene mucho pelo entre las almohadillas, será más fácil que acumule barro y suciedad. Por lo tanto, un pequeño recorte de vez en cuando impedirá que se convierta en un imán de porquería. Pero si no te sientes segura con las tijeras, lo mejor es acudir a un peluquero canino.

6. Entrena a tu perro para que colabore en la limpieza

Aunque hay razas que son más fáciles de adiestrar que otras, con paciencia y mucho mimo, todas pueden llegar a aprender que, al entrar en casa, hay que lavarles las patas.Cada vez que tu perro deje que limpies sus patas, prémialo con una golosina o mucho cariño. Con el tiempo, asociará la limpieza con algo positivo y será más colaborador, ¡incluso puede que llegue a gustarle!

¡Contenido exclusivo! Hazte con este ebook gratis “100 trucos fáciles de orden” para tener tu casa siempre a punto con los mejores consejos.

 

 

Perro con botas
iStock

7. Protege sus patas con zapatos o botines impermeables

Como ya sabrás, hay todo un universo en lo que a moda canina se refiere. Aparte de esos abrigos tan coquetos y esos jerséis con los que parecen modelos, los perros también tienen a su disposición zapatos y botines impermeables, perfectos para días lluviosos. Además, en el caso de las razas pequeñas, es una forma estupenda de protegerlos del frío. Lo único, asegúrate de que sean cómodos y de la talla adecuada. Y recuerda que no todos los perros toleran el calzado, así que introdúcelo poco a poco y con muchos premios de por medio. Y si ni con esas hay manera, aborta la misión.

Con cualquiera de estos trucos, evitarás que tu perro ensucie con sus patas tu preciada casa, y a su vez, mantendrás alejadas un montón de bacterias.

Te puede interesar