El aluminio es un material muy resistente, pero su contacto con el oxígeno suele provocar la famosa oxidación. Además, con el tiempo, las ventanas se ensucian de forma natural y mantenerlas limpias es una tarea obligatoria para asegurar que sigan funcionando mucho más tiempo.
Existen varios productos que pueden provocar el efecto contrario y dejar un acabado en el aluminio mucho peor del que estaba. Por tanto, saber cómo limpiar las ventanas de aluminio correctamente es indispensable para no dañarlas. ¡Toma nota de estos consejos!
Precauciones al limpiar las ventanas de aluminio
En el mercado hay muchos productos que pueden ser eficaces para limpiar el aluminio; sin embargo, los métodos caseros suelen ser los más prácticos y económicos de utilizar. Te recomendamos que los pruebes primero en alguna esquina poco visible de la ventana de aluminio antes de esparcirlo por el marco.
Antes de nada, recordar que una buena rutina de limpieza es primordial para asegurar un aspecto de tus ventanas, tanto por el interior como el exterior. Como regla general, limpiar los cristales cada mes y el marco y rieles de la ventana cada dos meses será más que suficiente.
Cómo limpiar el aluminio de las ventanas
Entre todos los trucos para limpiar puertas y ventanas, evita aquellos productos químicos o abrasivos con mucha lejía o las esponjas muy duras con los que corres el riesgo de arañar el material. En la mayoría de casos, si la ventana no está muy sucia, bastará con pasar un trapo suave con agua caliente y detergente o jabón neutro, para luego aclarar con papel absorbente o un paño limpio.
Otros productos para limpiar el aluminio
- Amoníaco: para las manchas más resistentes, echa en medio litro de agua una media taza de amoníaco y moja el paño dentro. Luego, frota suavemente el aluminio de la ventana con esta mezcla. ¡Quedarán como nuevas!
- Bicarbonato: el bicarbonato es el mejor aliado del hogar. Entre sus muchos usos, es conocido por quitar manchas de óxido del metal. Por este motivo, mezcla el zumo de una lima o limón (en su defecto, vinagre) con un poco de bicarbonato de sodio. ¡Esta mezcla quitará hasta las manchas de óxido más complicadas!
- Alcohol de quemar: el alcohol de quemar es un producto elaborado a base de metanol y que se usa para encender barbacoas y chimeneas, pero como también disolvente y anticongelante. Te irá genial si tienes mucha suciedad incrustada en el aluminio de la ventana. Usando un par de guantes de goma, mezcla una taza de vinagre blanco con media taza de alcohol de quemar y aplica el resultado con un trapo suave sobre la ventana de aluminio.
- Sal: la sal es un ingrediente muy útil para quitar manchas. Con harina y vinagre, prepara una pasta y déjala actuar un cuarto de hora. Luego, remuévela con agua tibia y empapa un poco en un paño suave y frota. Cuando termines, seca y si quieres, pule.
- Pasta de dientes: si eres fan de la limpieza, sabrás que la pasta de dientes elimina la suciedad del aluminio, ya que está compuesta por bicarbonato de sodio y peróxido. En un poco de papel, extiende un poco de pasta de dientes y restriégala por la ventana, haciendo hincapié en las manchas. ¡Todo un éxito!
- Kétchup: para eliminar el óxido de tus ventanas de aluminio solo tienes que coger el bote de kétchup de la nevera. Los ácidos del tomate lo convierten en un producto a utilizar más allá de la cocina. Extiende un poco sobre la mancha de óxido que quieres eliminar y frota con una esponja o trapo suave. ¡Y listo! Repite el proceso las veces que sean necesarias.
Trucos para limpiar y dar brillo al aluminio
Los limpiadores caseros funcionan muy bien para limpiar y dar más brillo a una ventana de aluminio. Te recomendamos que uses una cucharada de vinagre blanco, 2 cucharadas de zumo de limón y una taza de agua caliente.
Si tienes una botella spray, vierte esta mezcla dentro y rocíala por toda la ventana. Luego, con la ayuda de un paño, frota bien para quitar las manchas más difíciles. ¡Verás qué brillante queda tu ventana de aluminio!
Cómo recuperar el color del aluminio
Es muy probable que tus ventanas de aluminio lacadas, sobre todo las ventanas de aluminio blancas, acaben perdiendo su tono y brillo originales. Con vinagre, harina y sal podrás arreglar el tono oxidado y eliminar la mayor parte de suciedad.
Limpiar las ventanas de aluminio blanco
En este caso, es probable que tus ventanas de aluminio blanco estén cogiendo un color amarillento y ya no luzcan igual. Una de las mejores opciones para dejarlas impolutas es la mezcla de bicarbonato de sodio y limón. Por tanto, empapa un trapo o esponja suave con una mezcla de ambos ingredientes y frota las zonas más afectadas de tu ventana.
Limpiar ventanas de aluminio corredizas
El principal problema para limpiar que presentan todas las ventanas corredizas son los rieles. Para limpiar la parte del aluminio, puedes utilizar cualquiera de los consejos que te hemos dado antes.
En el caso de que tus ventanas de aluminio sean correderas, debes aprender cómo limpiar los rieles de la ventana. Primero retira las hojas de la ventana. Luego, esparce bicarbonato de sodio en el riel y mójalo con vinagre. Espera unos minutos y frota con un cepillo de dientes viejo. A continuación, aclara bien con agua. ¡Finiquitado!
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