Si tienes chaquetas de un solo uso, como un anorak para ir a esquiar que te has puesto una vez, lo mejor es que no lo guardes más. Sobre todo, si el esquí no es lo tuyo y vives en una zona donde la nieve brilla por su ausencia. Si hace más de 10 años que no te lo has puesto ese anorak, ya no lo harás. Si lo hicieras, además, se vería pasado de moda. Para una vez puntual que vayas a esquiar le puedes pedir el equipo a una amiga o alquilarlo.