Hay razas de gatos que solo son aptas para personas que puedan dedicarles mucho tiempo y atención. Es el caso del gato tonkinés, y es que esta raza que nació del cruce de un siamés y un burmés, es muy dependiente del contacto con los humanos, por lo que no tolera nada bien la soledad. No obstante, estamos ante un gato activo, muy curioso y juguetón que hará las delicias de los niños, e incluso de otras mascotas. Por no hablar de su elegante porte y sus preciosos y grandes ojos. ¿Te has quedado con ganas de saber más sobre la raza? Pues sigue leyendo, ¡porque te lo vamos a contar todo! Y por cierto, si buscas nombres para gatos, ¡en El Mueble encontrarás las mejores ideas!
Características del gato tonkinés
¿Quieres saber si tu gato es tonkinés? Presta mucha atención a sus características físicas. El gato tonkinés es de tamaño mediano y tiene un cuerpo musculoso, elegante, esbelto y, en definitiva, bien proporcionado. Sus ojos –de color verde o azul– son grandes y expresivos, con una forma ligeramente almendrada. Sus orejas tienen la base ancha y terminan en una punta redondeada. En cuanto a su pelaje, es corto y sedoso, de tacto aterciopelado. Puede ser de distintos colores: el más popular es el visón, pero también se admite el sepia, el color champán, el tono miel, el azul y el point.
Origen
El origen del gato tonkinés es bastante reciente y se encuentra en Canadá en la década de 1930. Allí, la criadora Margaret Conroy decidió cruzar al gato siamés con el gato burmés con el objetivo de crear un ejemplar que tuviera la morfología del siamés y el pelo del burmés. No obstante, al principio se lo conocía como siamés dorado, hasta que en el año 1971 fue reconocido oficialmente por la Asociación Canadiense de Gatos como tonkinés.
Nombre científico
Felis catus
Cuántos años vive
¿Deseas saber cuánto vive un gato tonkinés? La respuesta te tranquilizará, ya que es una raza muy longeva que puede alcanzar los 15 años sin problema.
Peso
Entre 3 y 5 kilos.
Carácter del gato tonkinés
Como te decíamos al principio, el carácter del gato tonkinés es sumamente cariñoso, afectuoso, simpático, muy activo y curioso. El tonkinés es, además, una mascota estupenda para convivir con niños y otros animales, ya que se adapta a ellos sin problemas. No obstante, esta raza necesita estar en continuo contacto con sus cuidadores, porque no lleva nada bien la soledad. Los mimos, las caricias, los ratos de juego... todo ello lo hacen feliz.
Por otro lado, al ser un gato tan activo y curioso, es importante procurarle todo tipo de juguetes y entretenimiento en casa (árboles rascadores, etc.). Además, si tiene la posibilidad de salir a explorar al aire libre –siempre y cuando se trate de un entorno seguro y controlado–, será todavía más feliz.
Un gato tonkinés con los ojos azules.
Cómo cuidar a un gato tonkinés
Por suerte, el gato tonkinés tiene una salud de hierro. Lo que sí es recomendable es cepillarle el pelaje varias veces a la semana con un cepillo adecuado a su tipo de pelo. Y por supuesto, procurarle una alimentación de calidad con proteínas de origen animal, como la dieta BARF.
Cuánto vale un gato tonkinés
Fuera de Canadá, es bastante difícil encontrar un gato tonkinés. En Europa apenas hay criadores, pero los precios oscilan entre 800 y 1.000 euros.
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