Que no sea una fecha señalada en el calendario no significa que tus comidas de diario (¡y tú!) no os merezcáis una puesta en escena cuidada. La elección entre una u otra opción es cuestión de gustos. Pero si sueles comer solo o en pareja, los caminos de mesa son la opción más práctica. ¿Por qué vestir toda la mesa con un mantel si solo vais a ocupar una parte? Por contra, si soléis comer en familia, quizás resultará más cómodo apostar por un mantel. Y siempre puedes completarlo con individuales para protegerlo de manchas, sobre todo si hay peques en casa. Para comidas rápidas o desayunos, no hay nada más práctico que unos individuales sufridos, por ejemplo, de fibras.
Y un consejo: antes de decidirte, presta atención a la etiqueta, porque cada vez hay más mantelerías con tratamientos antimanchas, que facilitan y mucho el día a día.