Cortinas perfectas para un salón con flow: todas las claves para dar estilo

Salón de verano con cortinas blancas — El Mueble

Los textiles son un recurso muy efectivo para renovar la imagen de cualquier estancia. De todos ellos, las cortinas son fundamentales, porque dan calidez y sensación de estancia "vestida" y vivida. Las cortinas arropan un salón, le dan elegancia y puedes emplearlas también para ganar luz, o incluso para dotar del toque de tendencia que buscas, si te decantas por un estampado u otro.

Ahora que viene el buen tiempo es el momento de que te plantees dar un cambio de look a tu salón con unas cortinas que contribuyan, no solo a crear una atmósfera fresquita y acogedora, sino también a dotarlo de estilo, o lo que es lo mismo, a crear un salón con flow.

Atenta a los colores

El buen tiempo nos pide tejidos ligeros en tonos claros, muy claros, tanto que el blanco sigue siendo el color preferido a la hora de vestir las ventanas. Pero en ese objetivo por darle flow al salón, te proponemos acompañarlos con unas caídas en uno de los colores presentes en la decoración. En este caso se optó por repetir el tono de la butaca de la zona de estar.

Un truco de estilo: carril oculto

Si no te gusta que las barras de las que cuelgan las cortinas queden a la vista, tienes muchos recursos para ocultarlas: desde las clásicas molduras decorativas hasta soluciones más actuales y minimalistas. En este salón, entre el techo y el ventanal queda un cajeado que se ha dejado para ocultar el sistema de las cortinas.

Un mix que funciona

Otra idea de cortinas perfectas para un salón con flow es la que nos inspira este proyecto de Marta Tobella. Unos estores paqueto de lino blanco, que recogidos forman unas ondas muy decorativas, visten tanto las ventanas, como las puertas acristalas que llevan al jardín. Estas últimas, además, llevan unas cortinas de barra que suman estilo y calidez.

Más allá del cristal

Cortinas: mejor dobles para tamizar la luz 00511383

¿Cuánto deben medir las cortinas de ancho? Mide el ancho de tu ventana y a esta medida, añade entre 15 y 20 cm más por cada lado. Ten en cuenta que una distancia demasiado corta entre la ventana y el final de la cortina no queda bien. Incluso, si quieres engañar al ojo, hacer más grande la ventana y a su vez al abrirla, con facilidad y que nos quede una visión más limpia y despejada, bien del ventanal, bien de unas puertas acristaladas, puedes añadir entre 20 y 25 cm por cada lado. En este salón, invaden parte de las paredes que flanquean el cerramiento.

Doble cortina

Una forma atractiva y muy práctica de vestir un cerramiento de puertas correderas que conduce al jardín es instalar un estor en cada hoja. De esta forma, cuando la puerta esté abierta podrás subir uno y dejar el otro bajado para tamizar la luz.

Propuesta bicolor

Las cortinas son un recurso ideal para poner un toque de color en la decoración del salón que será tan subido o tan relajado como tú quieras. Si no quieres arriesgar demasiado, apuesta por la paleta de los tonos neutros: blanco y beige o topo forman un dúo infalible, más aún si estos son también los colores que dominan en la decoración. Eso sí, elige las caídas en dos o tres tonos más subidos que las tapicerías de los sofás para ganar dinamismo y riqueza visual.

Estores dobles

Otra posibilidad es vestir las ventanas con dos estores coordinados. Puedes combinar los tejidos según te convenga, aunque lo ideal es que el estor que da al exterior sea liso, de lino o algodón, y el otro, opaco o de screen, sobre todo, si no tienes persianas. Como ves, es una alternativa original y atractiva a la tradicional combinación de cortina y visillo, que también permite recrear ambientes elegantes.

No temas a los estampados ni a la mezcla de tejidos

Salón con puertas acristalas vestidas con estor y cortinas estampadas.

Si en decoración de tu salón dominan los tonos neutros, no descartes apostar por algo por algo más arriesgado en las cortinas (todo lo arriesgado que tú quieras). Grandes motivos en tonos vivos y alegres quedarán igual de bien que unas cortinas decoradas con diseños discretos sobre fondo neutro o en la misma tonalidad que la pared.

¿Tienes que vestir un gran frente acristalado?

Como seguramente imaginas, no es lo mismo vestir ventanas pequeñas que cubrir grandes ventanales. En este caso, lo más práctico es instalar varios estores que se puedan abrir o cerrar por separado, ya que un gran estor único para un frente tan largo como éste sería muy difícil de manejar.

10.

Crea contraste cromático

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Y ganarás riqueza visual. A la hora de escoger el color de las cortinas es importante tener en cuenta el de la paredes, bien para crear un ambiente armónico en el que nada desentone, bien para crear contraste. Lo cierto es que si las paredes de tu salón son de color blanco, lo tienes muy fácil: cualquier color será una buena opción para las cortinas. Aunque eso sí, mejor que esté en la misma gama que las tapicerías, que exista un hilo conductor que dé unidad al conjunto.

11.

¡Se generosa!

Salón con sofá rinconero y juego de mesas nido redondas

Si has decidido vestir las puertas de acceso al jardín con unas caídas ligeras que tengan una buena caída, procura no escatimar con la cantidad de tela. Para que presumir de unas cortinas perfectas, tanto abiertas como cerradas, lo ideal es que las cortinas midan el doble, o incluso el triple, del ancho de la ventana.

12.

Una combinación que da mucho juego

Ventana de salón vestida con cortinas y estores

Combinar cortinas y estores para vestir las ventanas del salón sigue siendo una de las opciones preferidas de muchos interioristas. Y no es de extrañar, ya que esta pareja ofrece un sinfín de combinaciones posibles. Puedes elegir ambos tejidos en el mismo tono, en colores contrastados, jugar con lisos y estampados, apostar por el mismo tejido para cortinas y estores, confeccionar las caídas en lino o algodón y los estores de screen o fibra vegetal…

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