Una cocina azul con office y mucho encanto rústico

Si algo llama la atención de esta cocina es el azul. "Encaja con el entorno y el contraste con la madera y la piedra ofrece un punto muy actual y alegre", nos explica Begoña Susaeta, de Sube Interiorismo, que fue quien eligió este tono. 

Y es que los dueños de este txoko en el País Vasco le pidieron que ganara más luz en su lugar de reuniones familiares. El color y unos grandes ventanales nuevos lo consiguieron. La cocina elegida es el modelo Época de Santos, en el azul dominante. "Nos gustó, tanto a mí como a los propietarios, por esa hendidura que le da personalidad", dice Susaeta. Luego lo combinaron con dos enormes armarios botelleros hechos a medida por un carpintero. Y pintados con el mismo azul que el resto de la cocina. 

"En los armarios altos colocamos vitrinas con cristal. Así se tiene todo a la vista, pero a salvo del polvo y la grasa", explica. Después se incluyeron unos tiradores de Formani, "con un diseño muy fino, que aporta carácter. Buscamos el contraste entre los tiradores y la línea clásica de los armarios", recalca.

La estructura de la cocina es la original, al igual que la chimenea. El techo y las vigas se pintaron de blanco, potenciando la luz.

El suelo de terrazo original se cambió por un laminado en acabado roble en la zona de comedor y un porcelánico –que imita hidráulicos– en la cocina. "Además de diferenciar los espacios, conseguimos un poco de independencia para la cocina", matiza.

"En lugar de una gran mesa, pusimos tres. Así es acogedor tanto si comen cuatro como si se juntan todos y ponen aparte una mesa para los niños". El papel pintado, las sillas y los armarios continúan el azul de la cocina. "Incluso hicimos lacar las lámparas en el mismo tono".

La planta de esta supercocina con office tiene una longitud de 12,30 metros y su anchura es de casi 4 m (en la zona de los ventanales) y de 2,5 m en la cocina propiamente dicha. Perfecta para toda la familia.