13 salones pequeños REALES que cambiarán tu forma de pensar

Si siempre has creído que las chimeneas son exclusivas de los salones grandes, estás muy equivocad@. En este salón pequeño y ecléctico toda la decoración gira en torno a la chimenea de mármol. Frente a ella se ha dispuesto el sofá  con una mesa de madera y una alfombra grande y blanca que cubre todo el suelo y amplía el espacio.

El equipo de Mujika Aramendi Decoración ha elegido una base blanca para las paredes pero también puede valer una beige o arena que además de agrandar, da calidez. Unos cuadros de tamaño mediano (nada de pequeños), enmarcados con molduras, visten más y le dan mayor presencia al salón.

Si todavía dudas sobre si debes abrir o no tu salón al comedor, ¡convéncete! Para que un salón pequeño gane metros, debes eliminar barreras que lo tabiquen: paredes, puertas, vanos... Abrirlo al comedor es la mejor solución,  tal como ha hecho aquí la interiorista Pia Capdevila. Prolongas su medida hasta el fondo de la pared haciéndolo más grande a la vista.

Pia lo ha equipado con un sofá grande rinconero que es el que marca la distribución del espacio. Detrás de él ha colocado un aparador bajo de madera que zonifica y lo separa del comedor. La mesa de madera da calidez y la amplia alfombra es la responsable del toque acogedor.

¿Te agobia la idea de poner una estantería grande o un mueble generoso en tu salón pequeño? Sustitúyelo por una librería ligera o un aparador bajo que tenga baldas y una zona de armario para almacenar.

La interiorista Gabriela Conde ha dispuesto uno en madera natural que también sirve de asiento. Los ventanales le dan amplitud hacia el fondo y hacia los lados. Los sofás claros y con reposabrazos finos también ayudan a ganar espacio.

Si piensas que en un salón pequeño no se puede poner un sofá grande ¡sal de tu error! No solo puedes, sino que debes ponerlo. Un modelo por el que se decantan la mayoría de las interioristas es por uno rinconero. Permite aprovechar mejor la esquina y dotarlo de más asientos.

Fíjate en este salón de la imagen, LaiaUbia Studio pegó el sofá en L a la pared, en él caben fácilmente 6 personas. Queda justo bajo la ventana lo que no impide la entrada de luz. Una butaca y un puf cierran la zona.

¿Sabes qué tipo de mesa de centro le va bien a los salones pequeños? Las mesas tipo nido, es decir, 2 ó 3 mesas que puedes poner juntas o separadas allí donde las necesites. Una opción mucho más ventajosa que una única mesa de centro rectangular.

La estilista Sol Van Dorssen las eligió para este salón al que, además, equipó con un sofá blanco con reposapiés a juego, convirtiéndolo en chaise longue, y un puf redondo a modo de asiento o mesa auxiliar.

Si te gustaría poner en tu salón pequeño dos sofás en L o enfrentados pero no te cogen, la mejor solución es colocar dos butacas. Aportarán ligereza al estar. Colócalas frente al sofá, una en cada esquina. Y te quedará un salón tan estiloso y atemporal como este de la imagen, diseñado por Lorin Hansen, de A Touch of Class

Los salones pequeños cuadrados dan mucho juego. Ubica los sofás en L o enfrentados y en uno de los lados que queda libre cierra visualmente el área con dos pufs redondos. Aportarán ligereza y dinamismo al salón.

El interiorista Alejandro Maristany amuebló este de la imagen con un par de sofás con reposabrazos finos, una mesa de madera y dos pufs con tapizado similar a los sofás. Todo queda muy simétrico y ordenado. 

Como no eres muy amig@ de lo ostentoso, tu salón pequeño no te dará pie a ello. Elige las piezas justas y necesarias y no te arrepentirás. En este de la imagen, el interiorista Ricard Mena optó por un sofá blanco, una mesa ligera y una butaca. Más que suficiente para un entorno donde menos es más.

¿Tu salón pequeño es oscuro y no sabes cómo darle más luminosidad y amplitud visual? Estudia la solución que sugiere la interiorista Clara Masllorens en este de la imagen. Ha creado un cerramiento acristalado en el pasillo que lo comunica con el salón.

Para ello, empleó un cristal fijo enmarcado en roble con truco: es mitad transparente y mitad espejo, así entra la luz y genera profundidad. Como el sofá queda por debajo del murete, no se ve al entrar dando más intimidad.

Además de cristaleras, otra manera de darle profundidad a un salón pequeño es crear una celosía de madera. Te permite separar espacios e integrarlos sutilmente.

En este salón pequeño, la interiorista Paula Duarte ha diseñado una pared de lamas detrás de uno de los sofás. Separa el recibidor del salón pero a la vez le da a este perspectiva, agrandándolo visualmente.

¿Tienes un espacio abuhardillado y te gustaría hacer en él un saloncito? Fíjate en este. Es perfecto para conversar, ver la tele o como zona de lectura. Para ello Pia Capdevila lo ha equipado con una estantería a medida, súper ligera y con trasera alistonada.

Cuenta con estantes simétricos, una zona baja de almacenaje y sitio para colgar la tele. Al sofá le acompañan dos butacas y una mesa ovalada. Todo entra dentro de una alfombra grande que lo hace mucho más acogedor. ¿No te parece ideal?

¿Eres reacio a los muebles a medida? Descubrirás todas sus ventajas en cuanto veas que los muebles estándar no tienen cabida en tu salón pequeño. Un mueble de obra, como el de la imagen, te permite personalizar su diseño a tu gusto y adaptarse a la estancia como un guante.

El equipo de Aru Arquitectura ha diseñado este con chimenea, repisas y baldas y lo ha prolongado en un lado para hacer el sofá. Lo completan una mesa redonda y dos butacas.