Hay muebles que, cuando se compran, son casi casi para toda una vida. La mesa del comedor, una buena cama, una cocina con todas las comodidades y, por supuesto, el sofá son algunos de ellos. Por eso, plantearse comprar un sofá a medida no es descabellado. Es una pieza que durará bastantes años en tu casa y que usaréis toda la familia –piensa en cuánto tiempo pasáis sentados en él–, por lo que bien vale cada euro que inviertas.
Existen todo tipo de condicionantes que varían el precio de un sofá a medida. Desde el estilo, el tamaño –obviamente–, el tipo de sentada deseada, la variedad de tejidos y el espesor de la espuma. Hemos hablado con Alberto Torres, gerente de PortobelloStreet.es, una tienda online dedicada también a la venta de muebles a medida. Vamos por partes.
La estructura
Uno de los motivos generales para decantarse por un sofá a medida es quererlo con unas dimensiones determinadas. Bien para que encaje en un hueco de la estancia o porque lo necesitas de mayor tamaño de lo habitual. Y son, precisamente, el cambio en esas medidas estándar lo que más encarece un sofá a medida. "Generalmente, la estructura es un esqueleto de madera que viene estandarizado. En el momento en el que un cliente quiere algo personalizado, hay que hacer una única estructura, lo que encarece el precio", explica Torres. "Por ejemplo, si un cliente quiere un sofá de 1,90 y las medidas estandarizadas son de 1,80 m y 2,20 m, el precio que se le cobrará será el del sofá de 2,20 m", aclara.
"Solo el hecho de que el sofá no sea estándar ya lo hace más caro. Todo lo que aumenta las horas del trabajador, aumenta el precio final", dice Alberto Torres.
En el mercado hay sofás a medida cuyo precio oscila entre los 700 y los (más de) 4.000 euros, pero en sus opciones estandarizadas. "Si el sofá a medida se quiere cojines para la cabeza, que se haga cama o cualquier extra, también sube el precio. Todo depende del nivel de personalización", matizan desde PortobelloStreet.es.
El tejido del sofá a medida
Existen diferentes calidades entre los diversos tejidos para sofás, pero no es uno de los factores que más condicionan la diferencia de precio entre un sofá a medida y otro estándar. Sea cual sea el tejido que elijas para tu sofá a medida no condicionará en gran medida el precio final del sofá. "El precio de la tela depende del metraje que se necesite, por ese motivo, cuando se quiere una coordinación de tejidos es cuando el sofá aumenta su precio", explica Torres.
De esa manera, si buscas un sofá a medida y lo eliges con una sola tela será más económico que elegir dos, uno para la trasera y otro para la parte vista, por ejemplo. Hay todo tipo de tejidos para la tapicería del sofá, desde tejidos con tratamientos anti-manchas, especiales para mascotas (que evitan que puedan enganchar con las uñas) o con tratamientos antiarrugas.
El espesor de la espuma
En el mercado existen diferentes estándares en cuanto a la densidad de la espuma que será el relleno de los cojines del sofá. "Se mide en kilos –explica Torres–. La estándar, de 35 kilos, ofrece un confort medio. También puede ser más dura o más blandita, pero en realidad su elección conlleva una diferencia de precio mínima", añade.
Lo mejor de encargar un sofá a medida es que puedes personalizar todos y cada uno de sus elementos. También elegir un diferente relleno para el asiento y el respaldo. "Hace años se buscaba mucho el plumón de ganso para el respaldo, porque era muy mullido, aunque encarecía mucho el sofá, ya que las llevaban un tratamiento especial. Actualmente está en desuso, ya que con el paso del tiempo dejaba de ser mullido y se apelmazaba", dice Torres. Actualmente, uno de los rellenos más populares para el respaldo y de mejor calidad es la "floca o fibra hueca, un sintético que imita a la pluma, pero que puede aumentar el precio del sofá entre un 5 y un 10%", puntualiza.
Los extras
Pero no solo el tamaño, la tapicería o el tipo de relleno son personalizables en un sofá a medida. Hay otros elementos extra con los que también puede contar. Desde reposacabezas, a que se haga cama y hasta con bandejas extra a los laterales. Pero también pueden hacerse con almacenaje o con estructuras deslizantes que se estiran para colocar las piernas cómodamente. Otro de los detalles que se puede elegir es el tipo de sentada. "Hay gente que le gusta recostarse en el sofá y otras personas, sobre todo si son más mayores, que prefieren sentarse más rectos. Eso también es personalizable. Un sofá a medida siempre dependerá de las necesidades del cliente, aunque cuantos más extras tenga, más subirá su precio", detalla el gerente de PortobelloStreet.es.
Ventajas de los sofás a medida
- Puedes elegirlo de las medidas que desees, más grandes o pequeñas que las estandarizadas. También la altura de las patas, el respaldo y los reposabrazos.
- Pueden añadirse todos los extras que se quiera, desde reposacabezas, a que se haga cama, con almacenaje, con mecanismos deslizantes que se extienden para colocar las piernas o, incluso, una bandeja extra al lateral.
- Posibilidad de elegir el tejido que mejor se adapte a la decoración de tu casa.
- Será una pieza única, diseñada con tus preferencias y totalmente exclusiva.