Este pequeño dúplex solo tiene 30m2 por planta. "Con la integración del salón, el comedor y la cocina, el piso ha ganado mucha luz y se da la paradoja de que ahora parece más grande lleno que vacío", opina la decoradora de esta reforma Celia Crego.
¿La clave del proyecto? Construir un tabique que separara el salón de la cocina dejando una zona de paso, sin puerta y sin nada que lo entorpezca. El color gris piedra actúa como un elemento unificador de toda la zona.
Separar ambientes: el salón
Antes, había un tabique que separaba el comedor del resto del espacio y Celia decidió eliminarlo. Construyó un tabique nuevo de Pladur para dividir el salón de la cocina. En su interior hay una hornacina para colocar el televisor. "Al propietario le interesaba que quedara centrada para verla sin problemas desde el sofá", detalla Celia Crego.
El nuevo tabique mide 2 metros de ancho y la zona de paso mide unos 140 cm.
La cocina, muy bien aprovechada
El espacio no llega a 6 metros cuadrados. El armario va de suelo a techo y oculta, en la parte de arriba, la caldera. Debajo va la lavadora y justo al lado va el frigorífico. Toda la estructura es blanca. El armario de cocina también es de DM lacado en blanco. Todo el diseño fue realizado a medida por la diseñadora. Al igual que en el resto del piso, el suelo de la cocina es de porcelánico claro, para darle más luz al piso.
Plano y presupuesto
Este es un dúplex de nueva obra que estaba muy compartimentado. Su distribución inicial dejaba abierta la cocina. Prefirieron separar cocina y salón con un tabique. Es de Pladur y ponerlo salió por 800 €, sin contar con la instalación eléctrica. Todo el mobiliario de la cocina es diseño de Celia Crego y cuesta 16.000 €. Sisal orgánico lavable en el suelo; desde 390 €.