Desde pequeñita, Carolina recortaba fotos de la revista de El Mueble con los rincones que le parecían más bonitos, para que le sirvieran de inspiración cuando tuviera su propia casa. Y hoy es nuestra protagonista. La lectora nos abre las puertas de su casa en Pozuleo de Alarcón, donde vive con su marido, sus dos hijos y su perro.
Todo empezó con el nacimiento de su segundo hijo. "Nos dimos cuenta de que necesitábamos una casa de construcción moderna, más amplia y luminosa, en una zona tranquila, pero a la vez bien comunicada", explica Carolina.
Como buena lectora, confiesa que se inspiró en muchísimas ideas de la revista para decorar su casa. "Combiné los colores para crear un espacio tranquilo, pero a la vez optimista y alegre".
El rincón que más le gusta de la casa es el salón. Su gran ventanal, que va de pared a pared, deja entrar muchísima luz natural al espacio. Además, tiene acceso a una fantástica terraza donde les encanta organizar cenas al aire libre.
"Para poder utilizar la terraza todo el año, acristalamos el espacio con paneles móviles, tanto el techo como las paredes", cuenta la anfitriona. ¡Qué gran idea! Porque les permite disfrutarla a todas horas.
Otro detalle que nos llama la atención de la decoración de Carolina es la mezcla de muebles antiguos con modernos hechos a medida, junto a piezas adquiridas en viajes familiares. ¿Un ejemplo? La alfombra del salón la trajeron de Bélgica.
¡Algunos de sus muebles tienen más de 100 años! Según nos dice, el armario blanco con espejo de detrás del sofá, las bancas de la terraza y las butacas azules y blancas son heredadas de su familia.
Concretamente, de su bisabuela Carolina. Una mujer a la que todos admiran muchísimo en la familia (de ahí su nombre). "Se quedó viuda muy joven y sacó ella sola a cuatro hijos adelante montando un negocio familiar, en la época de la postguerra civil española", nos cuenta orgullosa. Y ahora ocupa un lugar indispensable en esta casa llena de recuerdos.