Hasta hace poco dedicar todo un artículo a cómo decorar la pared del cabecero parecía una exageración, pero la realidad es que todos nuestros lectores quieren más y más inspiración para llenar de estilo este rincón del dormitorio. Quien dijo que la única forma de decorarla eran los cuadros, erraba, y es que hay infinidad de ideas. 

Más allá de obras de arte, papeles pintados, espejos, tapices e incluso murales, hace poco nos topamos con una idea que, sinceramente, nunca habíamos visto antes. Y mira que llevamos más de 60 años siendo la revista líder en decoración. ¿Tienes curiosidad por saber de qué se trata?

ENAMORADOS DE LA PARED DEL CABECERO MÁS ORIGINAL

Empecemos por el principio. Hace unos días publicamos el reportaje de la Casa Copenhague, un proyecto de Lucía Casaus y el arquitecto Alexis González, de GC Studio, en Marbella. Y aunque toda la casa nos enamoró, sobre todo la increíble cocina de exterior con barra y vistas a la piscina, hubo un detalle que nos sorprendió.

Habitación romantica
El Mueble

La pared del cabecero del dormitorio principal no estaba decorada ni con cuadros, ni espejos ni con papel pintado. El efecto era elegante y sofisticado y es que se trataba de una pieza diseñada a medida a modo de moldura, pero con acabado textil. En resumen, es un panelado tapizado con tela de bouclé y con relieve en forma de lineas verticales. 

Esta estructura enmarca la cama y el cabecero, reafirmando el protagonismo de esta pared. Además, se ha elegido en una tela en pura tendencia, como es el bouclé blanco, que aporta luminosidad y aires modernos. Combina a la perfección con las paredes y el cabecero en color crema. Lo mejor de esta idea tan innovadora es que combina con cualquier estilo decorativo y con cualquier paleta de colores. Tanto si queremos un dormitorio moderno, como clásico, esta solución es ideal.

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POR QUÉ TAPIZAR LAS PAREDES

Hace años que las moquetas dejaron de ser un imprescindible en la decoración de interiores, pero eso no significa que debamos renunciar por completo a la calidez que aportan los tejidos. En lugar de tapizarlo todo, una buena alternativa es utilizarlos estratégicamente en ciertos rincones clave.

En este caso, se ha optado por revestir con una tela de bouclé una parte de la pared del cabecero, logrando un efecto acogedor. El resultado es un espacio mucho más cálido, algo indispensable en un dormitorio donde buscamos calma y sensación de arropo.

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