Tener una terraza o un balcón en casa siempre es un regalo que vale la pena aprovechar. Para crecer hacia fuera, crear rincones prácticos y de relax y tener un pedacito de cielo solo para ti. En general, lo habitual es que la terraza esté abierta al salón aunque si lo está al dormitorio también puede dar mucho juego.
Cuando se accede a la terraza desde el dormitorio lo más práctico es habilitar la terraza o el balcón para usos más privados, como puede ser un rincón de lectura, un pequeño estar para dos, un solarium... O incluso destinarlo a jardín urbano, vistiéndolo con flores y plantas para que, desde la cama, tengas la sensación de estar en un plena naturaleza.