Elena Tablada ya es uno de los rostros más conocidos a nivel nacional. Su trayectoria mediática se remonta al año 2005 cuando comenzó su historia de amor con el cantante David Bisbal. Sin embargo, en 2011 su relación terminó, con una hija en común de por medio, Ella (14 años). Años más tarde, en 2016, Elena Tablada comenzaba una nueva aventura personal con Javier Ungría, con quien se casaría en 2018 para finalmente divorciarse cuatro años más tarde, en 2022. Fruto de esta relación, nació la segunda hija de la diseñadora, Camila (4 años).
Ahora, Elena Tablada se encuentra en el foco de todos los medios de comunicación por mantener una guerra abierta con su exmarido.
No obstante, desde su separación, la también instagramer ha continuado con su vida, desconectando de sus apariciones en la prensa y la pequeña pantalla en su bonito piso situado en la urbanización El Soto en La Moraleja (Madrid). Una casa de estilo boho chic de la que hemos podido presenciar algunas de sus estancias a través de las redes sociales de la propia Elena Tablada. ¡Mira, mira!
Un piso con mucho encanto
Un dato curioso de la casa de Elena Tablada, es que realmente quien la compró fue David Bisbal cuando aún estaban juntos, y a pesar de que es una vivienda en la que la diseñadora ha residido con su exmarido y actualmente vive con sus dos hijas, será Ella, la niña que tiene en común con el cantante, quien herede la residencia cuando cumpla 24 años. Pero mientras tanto, Elena nos ha mostrado su afición por la decoración, dando a su piso una imagen de lo más curiosa y llamativa.
El salón es una de las zonas preferidas de Elena Tablada. En él ha sabido plasmar su personalidad y gusto a la hora de decorar. Es una apasionada de los tonos blancos y claros, aunque también tiene otra faceta más salvaje que veremos más tarde. Destaca el papel pintado que protagonizada la pared principal del salón, con rostros al más puro estilo 'line art'. La estética del salón mezcla elementos modernos como el confortable sofá en L y las mesas auxiliares geométricas con piezas más retro y clásicas como las lámparas de pie y de mesa en tonos dorados y de diseño.
Su dormitorio es otro ejemplo de que, en las zonas que necesitan inspiran calma y paz, Elena Tablada opta por tonalidades claras. El beige claro protagoniza la estancia principal, que también se extiende al cabecero, aunque si hablamos de materiales, la madera clara y en tonos tierra de su mesita de noche, ganan por goleada. Para armonizar el espacio dando un toque de luz, un bonito espejo redondo encabeza el espacio con un marco sutil dorado que añade mucha elegancia y sofisticación.
Un guiño salvaje en las paredes
Nos resulta inevitable no fijarnos en las paredes que visten la casa de Elena Tablada. Aunque hemos visto que tiende más a los tonos claros, no se corta en arriesgar y empapelar otras de sus paredes con un salvaje papel pintado con estampado de leopardos que añade vida y carácter al ambiente, sin duda alguna. Además, brinda mucha personalidad y originalidad a la casa, rompiendo con esa neutralidad y jugando mucho más con la decoración.
Y por supuesto, que no falte una amplia zona exterior. Una casa es más casa con un amplio jardín. ¡Elena Tablada lo tiene todo en la suya! Cuando el buen tiempo acompaña, disfruta de la compañía de sus hijas, volviendo a conectar consigo misma en este rinconcito de paz y relajación donde todos los días son verano. Además, la sombrilla de fibras naturales añade mucha frescura y un toque acogedor. ¡Nos encanta!