Tanto está siendo el auge de esta técnica, que incluso muchos la consideran como el 'nuevo yoga'. Una forma de desconexión como el yoga, que mezcla la meditación táctil con la creación de nuevas formas e ideas. Tanto es así, que muchos ya lo consideran como una forma de practicar 'mindfulness' y aprender a controlar las emociones.
¿Por qué practicar cerámica?
La cerámica se ha convertido en una técnica de relajación y de mejora de la creatividad en adultos. Además de liberar estrés, cuenta con multitud de beneficios como estos:
- Aumenta nuestro optimismo: la cerámica permite una mayor expresión de los sentimientos, mejora la autoestima y, en general, hace que seamos más optimistas.
- Mejora la concentración: la cerámica permite escapar del estrés y aumentar la concentración en el trabajo que estamos haciendo. De esta forma, si te cuesta concentrarte en algunas tareas del trabajo o en general, esta técnica es una buena forma de mejorarlo.
- Aumenta la espontaneidad: al crear diferentes objetos y diseños estamos mejorando la creatividad. Esto es un beneficio tanto para el trabajo, como para cualquier tema personal.
- Reduce el estrés: muchas personas durante el confinamiento practicaron técnicas creativas como la acuarela o la cerámica. Estas técnicas ayudan a evadirse del exterior y a reducir, por tanto, el estrés.
- Ayuda a ejercitar las manos: el movimiento de hacer cerámica ayuda a fortalecer la zona de las manos, muñecas y brazos. Esto previene problemas de artritis a largo plazo.
- Fomenta la sociabilidad: la cerámica, por norma general, se hace en pequeños grupos. Una actividad que aunque se realice de forma individual permite interactuar y conocer al resto de integrantes.
¿Cómo iniciarse a la cerámica?
Si queremos comenzar a practicar esta técnica podemos ir a un taller especializado. En muchas ciudades imparten clases de cerámica en grupos reducidos y a buen precio. Pero en el caso de no tener tiempo, otra buena forma es iniciarse online a través de cursos o vídeos en Youtube.
Herramientas básicas para practicar cerámica
Si vas a trabajar con arcilla necesitarás algunas herramientas. En el caso de que vayas a un taller, lo más probable es que te las faciliten. Aún así, por si te animas a comenzar a practicar cerámica en casa, te enseñamos algunos de los instrumentos básicos que no pueden faltarte.
Delantal y toalla
Si vas a hacer cerámica, lo mejor es vestir con ropa cómoda. Igualmente para que evites manchas en la ropa, lo mejor es adquirir un delantal largo y una toalla. Esta última, es ideal sobre todo para lavar las manos y quitar algunas impurezas de la cerámica. Te recomendamos que sea de algodón para que te dure mucho más durante los lavados.
Alambres de corte
Si es la primera vez que vas a usar arcilla, es mejor adquirir herramientas más económicas, como hilo de pescar o una pinza de madera. Con estos elementos se puede cortar fácilmente los bloques de arcilla o separar piezas en el torno.
Esponjas
Las esponjas son imprescindibles para calcular la cantidad de agua. Es una herramienta muy útil sobre todo en la parte inicial del torneado. Si está muy seco, la arcilla no girará y se secará, y lo mismo ocurre si lo dejamos muy líquido, que se terminará estropeando.
Raspadores
Aunque la principal herramienta de la cerámica son las manos, es cierto que de vez en cuando se necesita ayuda para moldear la figura. Sobre todo cuando se trabajan piezas grandes como jarrones, es importante contar con un raspador.
Alambres y punzadores
Son herramientas muy útiles y sirven para dar forma a la pieza y marcar algunos detalles. Suelen venir en kits así que suelen ser bastante económicos.
Moldeadores de madera
Tanto si utilizas torno como si moldeas a mano, estas herramientas son fundamentales. Son pequeños listones de madera, muy finos, con un extremo al que se le ha dado una forma concreta. Para que te hagas una idea, tienen un tamaño muy similar al de un lápiz. Además, al ser de madera es mucho más elástico y fácil de usar para moldear la arcilla.
Espátulas y pinceles
Las espátulas son similares a las que usan los pintores. Estas espátulas tienen un mango de madera, y un extremo metálico para dar forma a la figura. Eso sí, hay que tener mucho cuidado ya que si presionamos demasiado, podemos cortar la arcilla.
En cuanto a los pinceles, siempre hay que tenerlos a mano para retocar la figura o rectificar el agua.