Crear un rincón de meditación en casa significa tener un lugar especial solo para ti, que te ayudará a integrar en tu vida el hábito de meditar. Pero aunque no practiques la meditación como tal, tener un espacio con características concretas para relajarte, te obligará a parar, a dedicarte unos minutos y a practicar el mindfulness, que no es ni más ni menos que saber qué pasa dentro y fuera de ti.
No es aconsejable situar el rincón de meditación en los lugares de mayor actividad de la casa o zonas de paso. El dormitorio es una buena opción, aconseja la profesora de yoga Curra Márquez
Aunque la iluminación debe ser, preferiblemente, tenue a la hora de meditar para ayudar a la relajación y a que el cuerpo se entregue al estado de meditación, no significa que siempre tengamos que hacerlo a la luz de las velas. Una lámpara de luz cálida también sirve. Puedes rebajar la intensidad con reguladores o colocando un pañuelo sobre la pantalla –siempre asegurándote de que la tela no entra en contacto directo con la bombilla para evitar accidentes-. ¿Te relaja la luz natural? Deja que llegue tamizada o directa al rincón.
¿Dónde compro el material que necesito para mi rincón? Cojines, mantas, esteras y velas puedes adquirirlos en tiendas de decoración y los objetos más concretos en establecimientos especializados en yoga, artículos nepalíes o tibetanos. En los herbolarios encontrarás también esencias para aromatizar.
No olvides en tu rincón de meditación…
Integrar el efecto de la naturaleza. Esta influye positivamente en nosotros, en nuestro cuerpo y mente. Llévala al interior de tu casa con plantas, conchas y caracolas, agua, troncos…
Y si aún no te has enganchado, aquí te dejamos una serie de tips de meditación para principiantes.