Muchas de esas veces en las que te preguntas qué hacer de comer, te vienen a la mente recetas fáciles y rápidas con las que saciar tu apetito de la mejor manera posible. Elaborar caldos, sean de pollo, pescado o verduras, te llevará más de diez minutos, pero aun así siguen siendo una buenísima opción para comidas y cenas.

Uno de los motivos es que puedes preparar más caldo del que necesitas y luego congelarlo para tenerlo siempre disponible, ya sea en táperes altos o en bolsas de cubitos caseros para enriquecer tus platos. Gracias a esta previsión, podrás disfrutar de reconfortantes recetas de sopa de pollo siempre que quieras: con verduras para comer a diario, con fideos para cenar o con huevo duro y tostas para el fin de semana.