Todos sabemos que el secreto de muchos platos está, sin duda, en la salsa. Besamel, salsa verde, de tomate, carbonara, napolitana, mayonesa o brava, son algunas de las más conocidas, populares y ¡ricas! Aunque la asociamos principalmente a las recetas con patatas, la salsa brava es el complemento todoterreno que te ayudará a reinventar y realzar el sabor de muchos platos, como albóndigas, pechuga de pollo, carnes a la brasa, parrillada de verduras o champiñones.

Si bien hay ciertas discrepancias respecto a su origen, todo apunta a que fueron los madrileños los primeros en disfrutar de ella en forma de tapa alrededor de 1950, en bares como Casa Pellico y La Casona, hoy desaparecidos. Su fácil elaboración hizo que se propagara rápidamente y en la actualidad sigamos disfrutando de ella. ¿Te apetece prepararla en casa? Aquí tienes la receta.

Receta de salsa brava

Lo primero que tienes que saber es que, al igual que sucede con otras míticas elaboraciones, no hay una sola receta de salsa brava. Es más, incluso en una de sus versiones, la salsa brava no lleva tomate sino caldo de carne. En cualquier caso, aquí tienes la receta de salsa brava que el chef José Andrés compartió hace años en su programa de La 1 de TVE. 

Ingredientes (para 4 personas)

  • 1 cebolla troceada
  • 3 dientes de ajo sin pelar ligeramente aplastados
  • 2 latas de tomates pelados enteros 
  • 2 cdas. de pimentón
  • 2 guindilla cayena
  • 1 cda. de azúcar

 

patatas bravas salsa
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Cómo hacer salsa brava

Una vez tengas listos los ingredientes, solo queda seguir el paso a paso. Recuerda que las cantidades del picante son orientativas. Todo dependerá de tu gusto.

  • Paso 1. En una cazuela sofríe la cebolla y el ajo, hasta que notes que están dorados. 
  • Paso 2. Escurre los tomates, pícalos y agrégalos a la cazuela con un chorrito de aceite. 
  • Paso 3. Espolvorea pimentón, pero sin pasarte o estará demasiado fuerte. Siempre estás a tiempo de añadir más. 
  • Paso 4. El toque picante de la salsa brava viene de la mano de la cayena. Agrégala picadita y deja que reduzca.
  • Paso 5. Al igual que en la salsa de tomate tradicional, la salsa brava lleva un poco de azúcar para compensar la acidez del tomate. 
  • Paso 6. Pasa por el pasapurés para obtener una salsa homogénea y agradable al paladar, pero sin alterar el color del tomate.