Las recetas de pasta italiana son siempre una buena salida cuando no sabes qué hacer de comer. Por su fácil elaboración y su versatilidad, la lasaña se posiciona como una de las más populares ya que admite variados rellenos, puedes tomarla tanto fría como caliente ¡y está deliciosa! Para que te salga de 10 tienes que tener en cuenta dos cosas: la adecuada cocción de las placas y la elaboración de la besamel, si es casera mejor que mejor.
Por si tienes alguna duda, a continuación te contamos cómo hacer la besamel y un montón de recetas fáciles y rápidas de lasaña que ya estás tardando en probar. Te adelantamos que encontrarás desde la tradicional de carne picada, la saludable de verduras, la todoterreno de pollo y ¡hasta una vegetariana!
Cómo hacer besamel para lasaña
Hoy en día es fácil encontrar besamel ya preparada en la mayoría de supermercados, lo que te permite improvisar una receta de lasaña sin apenas invertir tiempo en su elaboración. Pero el sabor de lo casero se nota, así que si te apetece ponerte con ello en este artículo descubrirás cómo hacer la besamel para lasaña, que no necesitará ser tan espesa como la que utilizas para las recetas de croquetas, ni tampoco requerirá refrigerado.
La besamel es una de esas recetas sencillas que deberías saber hacer sí o sí, y en cada casa suele hacerse con ligeras variaciones. Esta es una receta básica para que puedas hacerla hoy mismo.
Ingredientes
- 100 gramos de mantequilla
- 100 gramos de harina
- 1 litro de leche
- Una pizca de nuez moscada
- Sal
Elaboración
- Paso 1. Calienta una sartén grande a fuego medio y derrite la mantequilla en ella. Agrega enseguida la harina y liga hasta hacer una pasta, procurando que no coja mucho color.
- Paso 2. Ve vertiendo la leche muy poco a poco, removiendo continuamente, para que se vaya integrando y te quede una mezcla suave y espesa.
- Paso 3. Cuece unos 10 minutos más, y añade sal y una pizca de nuez moscada. Deja enfriar antes de utilizarla en las croquetas o en cualquier otra elaboración.