La Confitería La Playa abrió sus puertas en Gijón en el año 1921 y, aunque ya sus creadores no estén con nosotros, su legado sigue más vivo que nunca gracias a las mujeres de la familia quienes son las encargadas de seguir gestionando el negocio con toda su solera. Por supuesto, no puede faltar su producto estrella, las princesitas de Asturias, un dulce compuesto por dos rosquillas pequeñas rellenas de una pasta de almendra y con cobertura de almíbar.
Pues bien, para que no te quedes sin probar este dulce manjar de los dioses por si no tienes pensado ir a Gijón pronto, te dejamos, a continuación, su receta para que puedas deleitarte con su sabor y textura tierna desde la comodidad de tu casa.
Cómo preparar princesitas de Asturias en casa
Dentro de toda la riqueza de platos de la gastronomía española, los postres y dulces ocupan un lugar especial. Suspiros de Pajares, carbayones, casadielles asturianas, moscovitas, marañuelas y, como no, las rosquillas tradicionales conocidas como princesitas de Asturias del recetario de Asturias no pueden faltar. Estas últimas, las puedes preparar en casa así de fácil.
Ingredientes
- 5 huevos
- Ralladura de un limón
- 3 cucharadas de almendra molida
- 1 cucharada de harina
- 1 cucharadita de levadura química
- 2 cucharadas de azúcar
- Azúcar glas
- Una pizca de sal
Modo de elaboración
- Paso 1. En primer lugar, vas a cascar los huevos y vas a separar las yemas de las claras.
- Paso 2. Añade las claras a un bol y, junto a una pizca de sal y las dos cucharadas de azúcar, vas a batirlas hasta montarlas.
- Paso 3. Cuando las claras estén montadas, añade la ralladura de un limón, las yemas y vuelve a mezclar hasta que los ingredientes queden bien integrados.
- Paso 4. Ahora, tamiza la harina con la levadura sobre el bol de los huevos y mezcla con una paleta mientras das movimientos envolventes. Añade la almendra molida y vuelve a mezclar.
- Paso 5. Cuando la masa esté lista, pásala a una manga pastelera con boquilla lisa y haz rosquillas de unos 3 centímetros de diámetro. Cuando las tengas, colócalas sobre una bandeja apta para el horno que, previamente, hayas forrado con papel sulfurizado.
- Paso 6. Pon la bandeja dentro del horno y hornea las rosquillas durante 13 minutos y a una temperatura de 180ºC.
- Paso 7. Cuando las rosquillas estén un poco doradas, sácalas del horno y déjalas que se enfríen.
- Paso 8. A continuación, añade cuatro yemas a un cazo y 50 gramos de azúcar. Sin dejar de remover, cuece estos ingredientes durante un minuto. Después, retira la mezcla del fuego y deja que se enfríe.
- Paso 9. Añade la yema confitada en otra manga pastelera y rellena las rosquillas. Para ello, debes coger dos masas, poner un poco de yema confitada sobre ella y cerrar con otra rosquilla.
- Paso 10. Para el glaseado, mezcla agua, azúcar glas y un poco de yema confitada diluida en almíbar.
- Paso 11. Pon las rosquillas rellenas sobre una rejilla y báñalas con el glaseado. Deja que se solidifique el glaseado y sírvelas en los papeles típicos que se usan para las magdalenas.